La Aduana de Argentina dijo hoy que efectúa
"controles específicos" en operaciones de exportación de carnes de
bovino, tras desmentir que se hayan cerrado los envíos de estos productos al
exterior.
Esa entidad precisó en un comunicado que "está cumpliendo con las
funciones operativas destinadas a constatar documentación, tipo de mercadería y
que ello concuerde con la declaración del exportador en la Aduana".
"No están suspendidas las exportaciones de carne", aseguró el
organismo oficial en la nota de prensa.
Las autoridades exigen a los exportadores de carnes la presentación del
certificado de Registro de Operaciones de Exportación.
El comunicado fue difundido después de que medios de prensa local informaran
que no se permitían despachos de carnes hacia el exterior en el puerto de
Buenos Aires.
Argentina cerró las exportaciones de carnes de bovino en marzo de 2006 para
contener el alza de los precios en el mercado local y luego las reabrió, pero
estableció un cupo mensual de 40.000 toneladas que no incluye los cortes Hilton
de alta calidad con destino a la Unión Europea, cuya exportación no está
restringida.
Los controles "específicos" a estas exportaciones se adoptan en
momentos en que en las principales ciudades del país se registra
desabastecimiento de carnes y otros alimentos básicos por la huelga que desde
hace 20 días cumplen productores agropecuarios en protesta por un nuevo esquema
de impuestos a las ventas externas de granos.
La protesta incluye bloqueos en las carreteras que han impedido la llegada de
materia prima a los frigoríficos, entre otras industrias, donde miles de
trabajadores han sido suspendidos por la inactividad.
Las carne vacuna es un producto básico de la dieta de los argentinos, cuyo
consumo promedio es de 69 kilos anuales por habitante, uno de los más altos del
mundo.
Según datos oficiales, Argentina exportó el año pasado 474.856 toneladas de
carnes de vacuno, por US$ 1.449,6 millones, un 10% más en valor que en 2006.