Los detalles de la reforma a Fonasa que será anunciada por Piñera este domingo
El 27 de enero regirá el nuevo IPC de la Salud, indicador que el Ministerio de Salud anticipa clave para el próximo ajuste de planes de las isapres en marzo, en la línea de contener las alzas y como apoyo a los fallos judiciales.
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El proyecto de ley que aplicará una profunda reforma a Fonasa creando un Plan de Salud Universal ya tiene fecha: el presidente Piñera anunciará el envío de la iniciativa al Congreso este domingo.
El pilar de la futura normativa es el establecimiento de una garantía explícita a todas las enfermedades y prestaciones contenidas en el plan del seguro público, fórmula que sigue el modelo de cobertura que rige actualmente para las 85 enfermedades Auge, especialmente en lo relativo al compromiso de periodos de atención máximos para cada patología.
En las vísperas del anuncio, el Ministro de Salud, Jaime Mañalich, se refirió ayer a los primeros lineamientos señalando que para cada enfermedad se va a fijar un plazo máximo para las prestaciones en cuatro ámbitos: interconsulta por un primer especialista, tiempo de espera para una consulta de control por parte de un especialista, cirugías corrientes y cirugías de alta complejidad.
Estos factores, añadió la autoridad, van a quedar considerados en términos generales en la ley y posteriormente se detallarán vía reglamento.
Sobre esta base, el secretario de Estado explicó que el futuro sistema operará mediante tres categorías de prioridad -alta, mediana y baja- lo cual no signitica que en este último caso, aclaró, que "no cuente con plazos, sino que va ser más prolongado que para los pacientes de altísima urgencia".
"La ley fijará los cuatro elementos y los tres criterios de severidad, cuya escala quedará definida en el reglamento que establecerá los tiempos de espera máximos específicos para cada patología. Por ejemplo, en el caso de una prótesis de reemplazo de cadera –cirugía que tiene una espera promedio de 433 días, la mayor de la OCDE- explicó que los plazos no serán los mismos para "una persona que no puede levantarse de la cama y está con licencia médica, que para otra que tiene un dolor que requiere un antiinflamatorio; entonces, van a haber tramos de enfermedades que van a tener distintos plazos. Y está claro que en casos como el cáncer de páncreas –no incluido en el Auge- los pacientes no puede esperar un año".
Mañalich abordó la reforma a Fonasa en el marco de su balance de la actividad legislativa relacionada al sector salud en el período 2018 y 2019, que considera la aprobación de diez proyectos, valorando la rápida tramitación de iniciativas como la ley que permite la intermediación de Cenabast para la compra de medicamentos de las farmacias privadas.
Para 2020, la autoridad señaló que la cartera trabajará en, al menos, 11 proyectos que tienen como denominador común los objetivos de disminuir el gasto de bolsillo de la población en la adquisición de medicamentos; garantizar una cobertura universal y protección financiera; la satisfacción de los usuarios; la mejora de la red pública de salud, y fortalecer la prevención.
Junto con subrayar la importancia de proyectos como la Ley de Fármacos II –actualmente en el Senado tras su aprobación por la Cámara de Diputados en noviembre–, en el ámbito de las normativas aprobadas vía decretos supremos destacó la que fija el Petitorio Mínimo (que establece los medicamentos esenciales que deben estar en todas las farmacias), la que permite la importación directa de medicamentos si su precio más bajo que en Chile y la que "aumenta el número de bioequivalentes para llegar a prácticamente al 80% de los fármacos que pueden ser copiados porque su patente ya venció".
Parte el IPC de la Salud
Este 27 de enero partirá la vigencia del nuevo IPC de la Salud, indicador que tendrá su primera aplicación en el cálculo del próximo ajuste en los planes que las isapres informarán este 31 de marzo, con vigencia para el período anual abril 2020-2021.
Mañalich indicó que el primer efecto de esta herramienta será introducir una mayor homogeneidad entre los precios de los planes complementarios de las distintas aseguradoras privadas, y agregó que posteriormente será una información decisiva para la resolución de los reclamos que los afiliados interpongan, tanto ante la Superintendencia del sector como ante los tribunales de justicia.
"Una vez que se entregue la información técnica a la Corte de Apelaciones y a la Corte Suprema, cuando se efectúen los reclamos a través de los recursos de protección, la justicia va a tener ahora un parámetro objetivo", indicó el secretario de Estado.
Al respecto, puso como ejemplo el caso de un afiliado al cual se le aplique un incremento de la prima a una tasa significativamente superior a la señalada por el IPC de la salud: "Lo más probable es que, efectivamente, las Cortes de Apelaciones fallen –a partir del porcentaje máximo que corresponde- , para que se rebaje el alza respectiva que esa isapre aplicó el 31 de marzo".
Mañalich indicó que este efecto de corrección será similar al que está ocurriendo actualmente con motivo del incremento de las primas GES que las isapres comenzaron a aplicar a octubre pasado con un incremento de 50,3% promedio, medida que objetó la Superintendencia de Salud oficiando a cada aseguradora para que fundamenten las razones técnicas de esa variación, y que ya suma del orden de 100 mil reclamos interpuestos ante ese organismo.
"Tal como ya estamos informando a las Cortes de Apelaciones y la Corte Suprema cuál es el alza en la prima Auge con motivo del nuevo régimen de garantías para 85 enfermedades, nosotros vamos a entregar a los tribunales de justicia, y a la propia superintendencia, cuánto es lo técnicamente justificado para los reclamamos que se le presenten a partir del 31 de marzo", explicó sobre el escenario que viene para el ajuste de los planes complementarios.
Junto con reiterar que el objetivo del IPC de la Salud en esta etapa será servir de referencia al sistema, el ministro explicó que en el futuro su aplicación será obligatoria para el cálculo de los ajustes en los planes de las isapres, lo cual está sujeto a la aprobación del proyecto de reforma al sistema asegurador privado que actualmente se tramita en el Congreso, específicamente en la Comisión de Salud del Senado.
"Si esto fuera ley, permitiría que la Superintendencia de Salud y el comité de expertos que establece este proyecto, determinen cuál es el precio máximo al cual se puede reajustar el plan de salud y señalen que cualquier otra alza sobre ello es ilegal, tanto en el caso de la prima AUGE como para el plan complementario, que es el reajuste más importante de las aseguradoras", argumentó.
Ley de devolución de excedentes de isapres: "Fue un gravísimo error"
Un duro cuestionamiento a ley que obliga a las isapres a devolver los excedentes de la cotización de salud a sus afiliados, formuló ayer el ministro Mañalich, quien afirmó que la norma que comenzó a regir en septiembre pasado va en la línea opuesta de las reformas en curso para los sistemas de seguro de salud público y privado. "Esa ley fue un gravísimo error que va en contra de los principios de la seguridad social en salud, tanto del proyecto de la ley de isapres como la de Fonasa, y la vamos a tener que corregir en la tramitación del Plan de Salud Universal", indicó. Lo anterior implicará, a su juicio, que la ley de devolución de excedentes "en la práctica se tiene que derogar, porque de lo contrario los números no van a dar". Al respecto, argumentó que la vigencia de esta ley –originada en una iniciativa parlamentaria- "produce una distorsión completa del principio de solidaridad que debe tener un sistema de salud, y ese sería un problema mayor dentro de la tramitación de la ley Fonasa y de la ley de isapre, porque no podemos crear un plan universal devolviendo excedentes".