La salmonera de los Montanari atraviesa un complejo escenario, incluso altas fuentes de la banca aseguran que “podría caer en default”.
Esta aseveración tendría asidero en que, por ahora, los bancos ya no están dispuestos a otorgar nuevas líneas para el financiamiento de la compañía, y de esta forma mantener la operación durante los próximos meses, misma postura que habrían asumido algunos proveedores ante la difícil situación financiera por la que atraviesa la empresa.
A esto se agrega, a nivel de industria, el efecto que tuvo en la caja disponible el reciente paro portuario, que imposibilitó por unas tres semanas el envío de productos al extranjero.
De hecho, fuentes del sector financiero señalan que en este escenario, la posibilidad de caer en default es cada vez mayor, ya que las posiciones por parte de la banca son menos flexibles que en el pasado.
Es más, altos ejecutivos comentaron que la última concesión que pretendían otorgar fue la prórroga del plazo de vencimiento de la cuota del 31 de enero por dos meses, hasta el 31 de marzo. Por ello es que una eventual nueva negociación de Invermar con sus acreedores se ve altamente improbable.
A pesar que en la banca señalan que no financiarían a Invermar, cercanos de la compañía indican que están “teniendo conversaciones”.
Nuevas fórmulas para subsistir
Con todo este complejo escenario que podría hacer peligrar su viabilidad, Invermar contrató a “un asesor externo de alto prestigio para buscar nuevos socios y/o formas de financiamiento”, señaló una alta fuente de la compañía a DF. Hasta ahora, no se ha definido qué fórmula o camino se tomaría para lograr la viabilidad, pero algunas de las alternativas que barajan son el cambio o aumento del control de la empresa y el ingreso de un nuevo socio. “Eso está por verse”, acota la fuente.
A la expectativa de números azules
Si bien aún no se aprueban los balances de 2013, la compañía tiene planeado hacerlo durante la primera quincena de marzo. Desde Invermar tienen la esperanza de que, contra viento y marea, puedan rescatar utilidades al cierre de 2013. “Anticipamos cifras azules”, estima una importante fuente de la empresa.
No obstante, el primer trimestre de este período se ve mucho más complejo, esto debido al reciente brote de virus ISA que afectó a la compañía y que según lo informado al regulador, desde ya proyecta menores ingresos por US$ 17,7 millones. Al interior de la empresa aseveran que “sin duda que la confirmación de ISA será un golpe duro para la compañía”.
Lo anterior empaña la proyección de la salmonera para este 2014 previo al brote de ISA, cuando estimaba que dado los buenos precios del salmón y el dólar fuerte, anticipaba un muy buen EBITDA. Ahora, sólo están a la espera de que “los buenos precios internacionales y el dólar fuerte nos ayuden a compensar”, acotaron.
Caja y convenants
Respecto de la situación de flujos de caja, éstos se deterioraron producto de las pérdidas que vienen arrastrándose desde finales del 2011 hasta la primera mitad de 2013, informó la compañía. En el último trimestre de 2013 se observó un positivo cambio de tendencia dadas las perspectivas de precios para el 2014.
En relación a los covenants exigidos al 31 de diciembre de 2013, enfrentados con los últimos resultados informados por la empresa al tercer trimestre del año pasado, mientras se pide una cobertura de gastos financieros de 1,40 veces, a esa fecha se obtuvo 0,93; en relación al patrimonio mínimo exigido que es de US$ 35 millones, al tercer trimestre lograron US$10,9 millones; en el caso del leverage menor o igual a 9,75, éste a dicho período arrojó 19,01.
Desconfianza
Aún cuando prácticamente no hay analistas que sigan a la empresa, entre los que siguen el sector señalan que “la única solución por ahora es que compren a Invermar”.
En tanto, la clasificadora de riesgo Humphreys calificó a Invermar en la categoría B- con tendencia “en observación” , y en “segunda clase” su clasificación de acciones.
De todos modos, en la alta cúpula de la salmonera sostienen que “todos los accionistas, tanto los minoritarios como los mayoritarios, creen que la compañía vale bastante más de su actual capitalización en bolsa”, aunque resignados añadieron que “lamentablemente, el mercado manda”.