Distribuidora trasandina ligada a Enersis suspende pago de deuda al Estado

Compleja es la situación que atraviesa la Empresa Distribuidora Sur (Edesur), la distribuidora eléctrica que Enersis y Chilectra poseen en Argentina.

La firma presenta una difícil situación financiera pues durante el primer trimestre arrojó pérdidas por US$31,4 millones, un 277,9% más que en igual periodo del año anterior.

Pero eso no es todo, ahora los problemas van sumando. De acuerdo a la publicación argentina El Cronista, Edesur suspendió un pago de deuda al Estado de ese país, todo esto luego de varios pedidos y reclamos, tanto a nivel empresarial como diplomático, asegura el diario transandino.

El lunes, Edesur le comunicó a Cammesa, la firma que administra el mercado eléctrico, que no desembolsaría un pago de US$ 6,9 millones ($31,5 millones en moneda argentina) por energía ya despachada.

En este caso, la empresa controlada por Enel extendió la responsabilidad al gobierno de la ciudad de Buenos Aires, a cargo de Mauricio Macri. Lo anterior, porque el jefe porteño se negó a pagar la factura de luz sin subsidios -como estipuló el gobierno a principios de año, cuando estaba en plena vigencia su plan para disminuir las subvenciones del Estado- y continuó abonando la tarifa anterior.




El complejo escenario


Y es que este complejo escenario no se instaló este año, viene desde antes.

Ya en sus estados financieros de 2011, Chilectra -que tiene una participación directa en indirecta de 34,04%- reconoció provisiones por los activos de Edesur por $ 49.783 millones (cerca de US$ 102 millones).

En tanto, Enersis, que tiene un 16,03% de la propiedad de la distribuidora, provisionó otros $ 106.750 millones (US$ 219 millones), aunque aquí también incluyó los activos de Central Costanera, una termoeléctrica que el grupo tiene en ese país.

En todo caso, el problema de Edesur en ese mercado no es puntual. Edesur es el distribuidor y comercializador eléctrico para la zona sur de la Ciudad de Buenos Aires y en doce distritos de la provincia de Buenos Aires, con unos 2,38 millones de clientes a fines del año pasado.

El problema que afecta a la firma, junto a otras eléctricas de la zona, es que el gobierno transandino no ha fijado nuevas tarifas, tal cual está determinado en el Acta de Acuerdo que congeló una demanda ante el Ciadi de Endesa contra el gobierno trasandino.Esta revisión de tarifas, que debería efectuarse de forma semestral y no ocurre desde 2006, está afectando las operaciones de las empresas distribuidoras en general y, particularmente, a Edesur.