Exintendente Andrés Jouannet: “Habría esperado que la ministra del Interior hubiera venido a La Araucanía anoche”
La exautoridad de La Araucanía le asigna la responsabilidad política de lo que sucede en la zona al expresidente Piñera y a su sucesor, Gabriel Boric.
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Aunque ha sido celebrada transversalmente, la detención de Héctor Llaitul no es la pócima mágica que termina con la violencia en la Macrozona Sur, lo que sí podría contribuir a ir bajando la intensidad de este fenómeno son buenas políticas públicas que aborden los temas de fondo. Al menos esa es la convicción del diputado Andrés Jouannet, exintendente de La Araucanía, quien ha sido uno de los que ha abogado, desde la Cámara de Diputados, que el estado de excepción se implemente en toda su dimensión, como lo permite –asegura- el propio decreto.
Esta mañana de jueves, se le oye decepcionado y lo primero que plantea, a raíz de la actuación del Ejecutivo en lo relativo a la detención de Llaitul es que “habría esperado que el gobierno, que la ministra del Interior hubiera venido a la región anoche, porque se vivió una noche muy tensa. Hubo varios ataques, los buses no pasaron…”.
Además, lamenta la naturalización que se ha hecho de estos episodios de violencia en La Araucanía, señalando que si anoche se hubieran quemado seis autos, “eso habría sido un escándalo”. De ahí que apunte drásticamente hacia el expresidente Sebastián Piñera, pero también al actual mandatario, Gabriel Boric, destacando que “el primer responsable político de esto es el presidente Sebastián Piñera y el otro responsable político es el presidente Boric”. De este último advierte que “no ha estado a la altura”.
Para el exintendente las señales políticas son valiosas y el actual gobierno, no las está dando, ya que si bien el subsecretario Manuel Monsalve ha viajado a La Araucanía –admite- de esas visitas “no han pasado cosas concreto”, se lamenta. En contraste, el Ministerio del Interior “le acaban de rechazar un proyecto por $ 40 millones del Fondo de Seguridad Pública al alcalde de Lumaco. Ahí está Capitán Pastenes, donde atacan y queman permanentemente camiones”.
El actual diputado detalla que anoche atacaron y quemaron camiones, se paró la carretera Norte-Sur y ocurrieron situaciones que hacían deseable que el Ministerio del Interior hubiera estado presente en la zona, porque el monitoreo desde Santiago o el hecho de que hoy jueves el subsecretario Monsalve y la ministra de Defensa, Maya Fernández se trasladen a las regiones afectadas no es suficiente, porque “aquí hay que dar señales políticas”.
Descargos de un exintendente
En esta conversación el exmilitante DC defiende lo realizado en la zona durante el segundo mandato de Michelle Bachelet, cuando el propio Jouannet como intendente hizo dupla con el entonces ministro del Interior Jorge Burgos, con quien trabajó en esa cartera como asesor de asuntos indígenas hasta que fue designado en el cargo, para enfrentar la violencia en La Araucanía.
“La gente tiene muy mala memoria”, dice el diputado, pero “cuando asumí yo, a Francisco Huenchumilla se le pidió la renuncia no por un tema político, sino porque aquí se quemaban todos los días camiones… ¡Todos los días! Y cuando yo asumo, se nos quemó un camión y no se quemaron más camiones”.
-¿A qué atribuye que haya pasado eso?
-A que trabajamos, a que creamos política pública, que el gobierno de (Sebastián) Piñera no creó, porque recuerdo que la derecha lo único que hacía era fustigarnos, pero en ese periodo creamos la Prefectura de Control de Orden Público en Pailahueque, en Ercilla; pusimos un segundo general con 1.200 hombres y mujeres que lograron bajar esto. Hicimos la Comisión Vargas –digo hicimos porque yo estuve en eso-; le entregamos material de verdad a Carabineros, nosotros entregamos vehículos de verdad a Carabineros, como el presidente Piñera que les entregó vehículos de mentira que venían dados de baja de la Armada y que no son aptos para La Araucanía.
-¿Cree que Piñera no aportó?
-Vino apuro hacer show. Aquí murieron 21 personas en el gobierno del presidente Piñera y en el nuestro no murió nadie. Esa es la diferencia.
-¿Cómo lo ha hecho, entonces, el actual gobierno?
-Este gobierno no tenía agenda en materia de seguridad pública, en general, y menos para La Araucanía. Ha ido aprendiendo a porrazos. Y yo hubiera esperado anoche que se hubieran venido para acá. Esa hubiese sido una tremenda señal política… ¡Si las señales políticas son muy importantes!
Y evocó la jornada en que siendo ministro del Interior Jorge Burgos y él mismo intendente recibieron el año 2016 con funcionarios de Carabineros de la Comisaría de Pidima. Señales políticas como esta –enfatiza- son las que debe dar el gobierno ante Carabineros. Porque es una forma de apoyar a Carabineros de hacerle ver que cuentan con el respaldo del gobierno en sus funciones, dice, porque “los que hoy día están adelante son los carabineros y los militares”, pero destaca que “en nuestra época, para bajar la violencia, nunca requerimos militares, quien trajo a los militares fue el presidente Piñera y el presidente Boric ha continuado con la misma política, pero sin ninguna cuestión novedosa”, advierte.
De ahí que, con la experiencia acumulada en su paso por la intendencia, el diputado haya hecho una serie de propuestas al gobierno que se niega a considerar, como la creación la Prefectura de Control de Orden Público en Tirúa; la creación de la Policía Militar de Fronteras, convencido como está de que desde Argentina están entrando las armas a La Araucanía y para liberar con ello a 1.600 carabineros; la entrega de dos laboratorios de criminalística móviles nuevos a la PDI, para que las policías puedan hacer los primeros análisis en tiempo real y no se contaminen las escenas y no se puede llegar a condenas; y, por supuesto, ha informado sobre la necesidad de más efectivos en la zona.
Sin embargo, acusa falta de “voluntad política” de la actual administración, pero también de “incapacidad”, porque el Ministerio del Interior se está asesorando por “gente que no sabe” como enfrentar el problema, porque no “ha puesto un pie jamás en La Araucanía” y no sólo desconoce el territorio, sino también las costumbres del mundo mapuche, se lamenta.