Siguen los cuestionamientos a la adjudicación del Instituto de Tecnologías Limpias (ITL) al consorcio Associated Universities Inc (AUI), conformado por nueve universidades de Estados Unidos - Harvard, Massachusetts Institute of Technology (MIT), Columbia, Princeton, Cornell, Pensilvania, John Hopkins, Rochester y Yale- además de cuatro universidades locales: del Desarrollo (UDD), San Sebastián, Autónoma de Chile y de Atacama.
A las críticas vertidas por rectores de universidades tradicionales, parlamentarios de oposición, la Asociación de industriales de Antofagasta y empresas tecnológicas chilenas, se suma el director ejecutivo de la Asociación para el Desarrollo del Instituto de Tecnologías Limpias (Asdit), Víctor Pérez, uno de los tres consorcios que participaron en la licitación, quien se va en picada contra AUI.
"AUI es una estructura, que organiza consorcios y que no tiene la capacidad instalada, ninguna de estas universidades participa directamente como se menciona, hay ciertos representantes en el directorio, pero no hay un compromiso hoy concreto y firmado por los rectores de cada una de estas universidades de participar en AUI", sostiene.
Añade que el consorcio "se disfraza de una suerte de participación de universidades internacionales de prestigio", es una asociación que se creó con estas universidades en los cuarenta, tras la segunda Guerra Mundial con el Plan Marshall, pero luego "se excluyen y queda esta asociación que tiene por objetivo estructurar consorcios tecnológicos en el mundo, acá no está Harvard ni el MIT".
Sostiene que "es una carcasa artificial, se menciona que están integradas, pero no es efectivo, tienen un modelo de gestión tecnológica aplicado en esta asociación en el que no están comprometidas directamente las universidades", afirma Pérez.
Afirma que en el caso de Asdit, a diferencia de AUI, el segundo proyecto más importante, de US$ 13 millones, involucra directamente al MIT y a un consorcio chino.
"Todos los actores estamos alineados en una visión común"
Pérez comenta que Asdit desde hace un año que viene trabajando en la materialización del proyecto.
"Esta convergencia que tenía un altísimo grado de compromiso con la región de Antofagasta, con el territorio y las comunidades, se logró en el tiempo con una secuencia continua de discusiones y acuerdos. Todo el consorcio estaba súper comprometido en hidrógeno verde, en desarrollo territorial en Antofagasta, en el impacto en la macrozona norte, en el desarrollo del país y en el desarrollo e impacto global. Todos convergimos y estábamos alineados", sostiene Pérez.
Comenta que en 2020 realizaron 42 reuniones de directorio y que ya estaban con estatutos circulando para poder constituirse rápidamente y entrar en acción. "El aterrizaje de Asdit era muy real e inmediato, en un mes podríamos haber estado trabajando en el norte en un mes, porque ya tenemos el alineamiento y una cultura de trabajo que nunca antes se había visto en Chile".
Sobre la propuesta de Corfo se sumar a las entidades regionales a la gobernanza del ITL, sostiene que "las universidades del norte y la AIA siguen siendo Asdit, privilegian la lógica que ocurrió en términos de interacción para que ocurriera esta lógica de desarrollo tecnológico para el país", dice.
Antecedentes por Transparencia
Pérez adelantó que hoy jueves pedirán los informes de la adjudicación del ITL por Transparencia. Señala que de acuerdo a la información que presentó el vicepresidente ejecutivo de Corfo, Pablo Terrazas, en la Comisión de Desafíos del Futuro del Senado, la evaluación constó de tres etapas.
"En la primera comisión de independientes internacionales, el mayor puntaje lo obtuvo Asdit, en la segunda, una comisión interna de Corfo, donde participan tres ejecutivos de Corfo, uno de Economía y otro de Ciencia, ganó AUI, lo que indica que hubo un empate técnico que terminó dirimiendo un Consejo de Ministros que, en la práctica, fue de subsecretarios", afirma.
El Consejo de Ministros de Corfo, según informa la estatal, lo integraron la ministra de Desarrollo Social, Karla Rubilar, el exministro de Agricultura, Antonio Walker, José Luis Uriarte, subsecretario de Turismo; Carolina Valdivia, subsecretaria de RREE, Alejandro Weber, subsecretario de Hacienda y Felipe Commetz, gerente general de Corfo.
Pérez señala que una vez que tengan los informes del proceso y los analicen, determinarán qué acciones tomar.
Declaración Asdit
En una declaración pública, la Asociación para el Desarrollo del Instituto de Tecnologías Limpias (Asdit) - liderado por Corporación Alta Ley, la Asociación de Industriales de Antofagasta (AIA), ocho centros de investigación y 11 universidades del país- y uno de los tres consorcios que participaron en la licitación del ITL, manifestó sus reparos a la decisión de Corfo.
"Nos parece un despropósito que un consorcio internacional, con escasos vínculos con el mundo minero y energético chileno, pretenda liderar a través del ITL una propuesta de desarrollo sustentable en la región de Antofagasta y de una nueva industria para nuestro país". Agrega que "cuesta entender cuáles son los atributos que distinguen de manera tan especial a la propuesta seleccionada y que no ha sido posible conocer a la fecha".
Agrega que "sorprende ver que se entrega esta crucial toma de decisión en la última fase, bajo un virtual empate técnico, a una comisión de ministros subrogantes compuesta por subsecretarios, muchos de ellos con escasa vinculación con el alcance de esta licitación", señala la misiva.
"Nos parece un despropósito que un consorcio internacional, con escasos vínculos con el mundo minero y energético chileno, pretenda liderar a través del ITL una propuesta de desarrollo sustentable en la región de Antofagasta y de una nueva industria para nuestro país".
Ver texto completo de Declaración Pública Asdit.
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