FT: Economistas en Chile advierten que paquete de Piñera debe ser solo el comienzo
Expertos aseguran que la situación fiscal del país permite hacer un esfuerzo mayor y el costo de no solucionar la crisis podría ser mucho más alto.
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Los analistas en Chile están cuestionando que las reformas anunciadas por el presidente Sebastián Piñera sean suficientes para aplacar el estallido de disturbios, a medida que los saqueos y el vandalismo continuaban por sexto día.
Esta semana Piñera ofreció un aumento en los salarios, los pagos sociales y los subsidios a la energía y la salud, al tiempo que se disculpó con los chilenos por una "falta de visión" al abordar la frustración acumulada.
Los economistas locales dijeron que las concesiones del multimillonario exempresario, cuyo costo estimado es de unos US$ 1.200 millones al año, podrían ser insuficientes.
"El paquete va en la dirección correcta, pero aún es pequeño", dijo José de Gregorio, exdirector del banco central. “Estamos viviendo un terremoto social, por lo que debería tratarse como tal. Reconstrucción, recuperar la confianza y la armonía, eso es costoso".
De Gregorio estimó que, en lugar de aproximadamente 0,4% del Producto Interno Bruto que representa el paquete de Piñera, la situación merecía gastar más cerca de 1% de la economía chilena de US$ 300 mil millones.
Eduardo Engel, un economista clasificado en 2016 como la figura pública más admirada del país, valoró el "cambio de tono y el reconocimiento de las principales deficiencias en las políticas públicas" de Piñera, pero también dijo que la escala del paquete se quedó corta.
Con un déficit presupuestario manejable de solo 2% del PIB y una relación deuda pública/PIB relativamente baja de alrededor de 25%, los economistas argumentan que Chile tiene espacio para satisfacer muchas de las demandas de los manifestantes.
Tal estímulo podría ayudar a compensar cualquier golpe a la actividad económica si hubiera más huelgas después de los paros convocados por los sindicatos el miércoles en algunas de las minas de cobre más grandes de Chile. En este momento, se espera que el crecimiento del PIB repunte desde alrededor de 2% este año, afectado por la caída en los precios del cobre, a 3,5% en 2020.
Pero la pregunta es qué tan costosas podrían ser las consecuencias si el gobierno no logra calmar los disturbios públicos y aumentan las preocupaciones de los inversionistas de que una coalición de centro derecha podría ser reemplazada por una administración populista en las próximas elecciones presidenciales en 2021.
Los analistas advierten que esta perspectiva podría llevar a una venta masiva en los mercados, mientras que los inversionistas también podrían asustarse si hubiera un nuevo impulso por una asamblea constituyente que reescriba la constitución, dadas las incertidumbres que tal proceso traería, según los analistas de Citigroup.
Una salida exitosa a la crisis bien podría aumentar el precio del paquete de reformas de Piñera si se abordan las preocupaciones que impulsan las protestas, incluidos el costo y la calidad de la atención médica, la educación y las pensiones.
"Chile puede permitírselo", dijo De Gregorio, y agregó que la propuesta inicial del gobierno debería servir como punto de partida para una negociación exitosa. “No podemos esperar al crecimiento: este país necesita redistribución… ha habido progreso (en la reducción de la desigualdad en las últimas décadas) pero no a la velocidad que exige el país".
Engel dijo que Chile necesita un nuevo gabinete, así como medidas concretas que aborden los conflictos de intereses. “Tan importante como las medidas económicas, se necesitan medidas políticas. En el corazón de los disturbios sociales está el hecho de que la política no está funcionando en Chile en este momento, los políticos de todos los sectores no están haciendo un buen trabajo de representación", dijo.
Robert Funk, politólogo de la Universidad de Chile, dijo que lo que más deseaban los manifestantes era un sentido de "dignidad".
"Tirar dinero a la situación es un paso en la dirección correcta, pero no resuelve el problema más profundo", advirtió Funk, diciendo que los manifestantes se sintieron traicionados y abusados por las clases dominantes. "Eso va a ser muy difícil de resolver".