IPSA cae por presiones globales y rompe una racha de siete jornadas al alza
Un deteriorado clima de inversiones mundial arrastró al IPSA, aunque el selectivo cerró agosto con un avance mensual de 3,5%.
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Los atisbos de optimismo se disiparon y todas las bolsas cerraron con pérdidas la última jornada de agosto, que para Wall Street fue una cuarta sesión consecutiva a la baja y para el IPSA fue el quiebre de una racha alcista de siete días, impulsada por las perspectivas de que el Rechazo se imponga en el plebiscito de este domingo.
En concreto, el S&P IPSA cerró la sesión con una caída de 1,72% hasta los 5.441,26 puntos, tras haber subido continuamente desde el 22 de agosto.
Las caídas de papeles como Cencosud (-6,49%), CAP (-4,60%), Falabella (-4,00%), Banco de Chile (-2,26%) y SQM-B (-1,75%) terminaron por inclinar la balanza del selectivo local.
"Aunque el mercado estima que ha aumentado la probabilidad de un triunfo del Rechazo en el plebiscito sobre la nueva Constitución, la incertidumbre es alta, lo que afecta al IPSA", señaló el gerente de estudios de Renta4, Guillermo Araya.
A esto agregó que "hoy fue el último día para vender acciones con exención de impuesto a la ganancia de capital, lo que también habría generado una presión a la baja en el precio de las acciones".
Con todo, el desempeño mensual del IPSA fue positivo: creció 3,46%, después de subir 6,24% en julio. Cencosud (30,64%), Mallplaza (30,62%) y Parque Arauco (24,51%) lideraron las alzas de agosto y solo seis acciones cayeron, encabezadas por Vapores (-13,49%), CAP (-12,31%) y Concha y Toro (-10,02%).
Liquidación mundial
En la Bolsa de Nueva York, el Dow Jones perdió 0,88%, el S&P 500 retrocedió 0,78% y el Nasdaq Composite bajó 0,56% al cierre de una cuarta sesión consecutiva de pérdidas. A nivel mensual, las caídas de los tres índices fueron de 4,06%, 4,24% y 4,64%, respectivamente.
Los mercados acogieron esta mañana un reporte que dio cuenta de una menor fortaleza del mercado laboral en el sector privado, por lo que aumentó la previsión de menores alzas de tasas de la Reserva Federal.
El brote de confianza no duró mucho y los aires más pesimistas terminaron por imponerse. Además se conoció el reporte de agosto del barómetro de negocios de Chicago elaborado por Market News International, cuya puntuación avanzó un mínimo 0,1 hasta 52,2, frente a la expectativa de que llegaría a 52,5.
El balance general de los analistas es que los últimos días de agosto fueron condicionados de forma dramática por el duro discurso en Jackson Hole del presidente de la Fed, Jerome Powell, donde prometió una firme senda de ajustes monetarios hasta devolver la inflación a la meta de 2% del banco central estadounidense.
"Los mercados contaban con alzas de tasas limitadas y recortes de tasas rápidos", dijo a CNBC el director de inversiones de Commonwealth Financial Network, Brad McMillan. "El discurso fue claro, pero con aumentos mayores y recortes más retrasados que lo esperado", añadió.
Tras liquidar sus posiciones de mayor riesgo, los inversionistas tomaron resguardo antes de conocer un importante reporte de creación de empleos públicos y privados que se publicará este viernes en EEUU.
En Europa, los índices también cerraron a la baja por cuarta vez. El paneuropeo Stoxx 600 cayó 1,12%, el FTSE 100 de Londres perdió 1,05%, el CAC 40 de París retrocedió 1,37%, el DAX de Frankfurt bajó 0,97% y el IBEX 35 de Madrid descendió 1,17%.
Los mercados europeos reaccionaron a un entorno de inversiones golpeado por el alza de precios: el instituto Eurostat informó que la inflación anual de la Eurozona ascendió a un histórico 9,1% en agosto, y la cifra subyacente alcanzó un 4,3% también histórico.
Respecto de Asia, el Nikkei 225 de Tokio cayó 0,37%, mientras que el Hang Seng de Hong Kong y el CSI 300 de China continental cerraron sin cambios relevantes.
En China se publicaron los índices de gestores de compras (PMI, sigla en inglés) elaborados por la Federación China de Logística y Compras. Aunque tuvo una leve alza, el PMI manufacturero se mantuvo en territorio de contracción, lo que dejó un mal precedente a los mercados occidentales.