Inversionistas se rebelan
Accionistas estuvieron a pocos votos de dar un golpe al directorio de GE por el control del mayor grupo industrial de Estados Unidos.
- T+
- T-
Por E. Crooks y D. McCrum
Los accionistas de General Electric estuvieron cerca de ganar una votación el miércoles que les habría dado más control directo sobre el mayor grupo industrial de EEUU por capitalización de mercado, en contra de los deseos del directorio.
En la última señal de un creciente activismo de los accionistas en EEUU, una propuesta en una reunión anual de GE en Detroit para permitir que los accionistas tomen decisiones sobre la compañía a través de un “consentimiento escrito”, ganó el apoyo de 47,5% de los votos.
Esto habría significado que los accionistas no habrían tenido que convocar a una reunión especial para lograr cambios en la empresa.
La moción fue respaldada por Institutional Shareholder Services y Glass Lewis, las firmas asesoras de gobierno societario. Fue también un voto significativo para designar a un presidente de directorio independiente, respaldado por un 22% de los votos. La votación en GE refleja una tendencia mayor en el gobierno societario, a medida que los accionistas activistas se enfocan en temas como el acceso de los accionistas al contenido y momento en que se realizan las reuniones de los inversionistas, y la habilidad de presentar una pregunta al resto de los inversionistas.
El control de la fecha en que se realiza una reunión, y los temas que se abordan, son factores clave en la habilidad de un directorio para resistir una toma de control hostil, o la presión de un gran accionista.
El tema recibió un ímpetu renovado el año pasado cuando la corte federal de EEUU descartó las nuevas reglas que se introdujeron luego de la reforma financiera de 2010, que habría hecho más barato y fácil para los accionistas de largo plazo proponer medidas en reuniones anuales. Los activistas están proponiendo una gama de medidas diferentes a una compañía en base a cada firma.
La propuesta de GE fue respaldada por Kenneth Steiner, un accionista activista de retail, quien argumentó que habría otorgado a los inversionistas una forma poco costosa de cambiar a los directores o forzar a los ejecutivos a tomar decisiones estratégicas. La moción argumentó que el actuar de los accionistas a través de un consentimiento escrito es permitido en cientos de empresas estadounidenses listadas en bolsa, y que en 2010 fue adoptado por voto de los accionista el 13. Sin embargo, el directorio de GE describió la provisión como “totalmente innecesaria” y dijo que “no satisfacerá a los mejores intereses de los accionistas.
Las acciones de GE han perdido 45% de su valor en los últimos cinco años, en comparación con la caída de 7% del S&P 500.