T. Hale, T. Kinder y H. Lockett en Hong Kong y S. Yu en Beijing
Los inversionistas en un bono internacional de Evergrande dicen que aún no han recibido un muy esperado pago de intereses que vencía el jueves, lo que aumenta la incertidumbre sobre la crisis de liquidez del desarrollador inmobiliario más endeudado del mundo.
El pago de US$ 83,5 millones tenía como fecha límite la medianoche del jueves en Nueva York o el mediodía del viernes en Hong Kong. Dos personas con conocimiento directo del asunto dijeron que el viernes no se había recibido ningún pago en Hong Kong.
El grupo inmobiliario, que no ha hecho una declaración sobre el reembolso, tiene un período de gracia de 30 días antes de que el incumplimiento resulte oficialmente en un default.
Evergrande, cuya mora había sido ampliamente anticipada desde hace semanas, se encuentra en el centro de una tormenta sobre la salud del enorme sector inmobiliario chino, mientras el gobierno busca tomar enérgicas medidas contra el exceso de deuda.
Sus problemas sacudieron los mercados bursátiles y de materias primas mundiales esta semana antes de que se cumpliera la fecha límite, a medida que los operadores sopesaban las implicancias de una desaceleración en una industria inmobiliaria que ha anclado el crecimiento económico de China durante décadas.
Señales en el sector
El vencimiento de Evergrande se cumplió en momentos en que surgían nuevas señales de estrés en el sector. En una carta al gobierno municipal de Shaoxing en la provincia oriental de Zhejiang, la oficina local del desarrollador Sunac China solicitó "asistencia política", ya que atraviesa lo que calificó como un "punto de inflexión en la industria inmobiliaria china".
"Nunca hemos experimentado un cambio tan radical en el entorno externo", dijo la oficina de Shaoxing, señalando una caída interanual de 60% en las ventas de viviendas durante el verano.
"El mercado está casi congelado", agregó en la carta, que fue vista por Financial Times. "El radical cambio en la política y el entorno han perturbado seriamente nuestro negocio y ha hecho que sea muy difícil mantener las operaciones normales".
Dos personas familiarizadas con las dificultades del desarrollador confirmaron el contenido de la carta. Una de las personas dijo que reflejaba las opiniones de la sucursal de Shaoxing, pero no de la oficina central de Sunac en Beijing.
La firma no respondió a una solicitud de comentarios y el gobierno de Shaoxing no estuvo disponible de inmediato para declaraciones.
El segundo mayor accionista de Evergrande, el desarrollador hongkonés Chinese Estates Holdings, dijo que está vendiendo su participación de 6,5% en el grupo y que sufriría una fuerte pérdida.
Un gobierno municipal de la provincia central de Anhui también anunció que está retomando la propiedad de unos terrenos que Evergrande no pagó.
Evergrande, que enfrenta pasivos totales de más de US$ 300 mil millones, advirtió en agosto del riesgo de incumplimiento tras una poco común reprimenda pública de Beijing. La caída de los precios de su deuda contribuyó a elevar los rendimientos en el mercado asiático de bonos de alto riesgo de US$ 400 mil millones, donde es uno de los mayores emisores.
El precio del bono denominado en dólares cuyos intereses vencieron el jueves ha colapsado debido a que los inversionistas anticiparon el impago que activaría el mayor proceso de reestructuración en la historia financiera de China. El pagaré, que vence el próximo año, se cotiza actualmente a 33 centavos por dólar.
Muchos de los bonos en dólares de Evergrande se cotizaban a unos 30 centavos por dólar el viernes, lo que indica fuerte angustia, mientras que las acciones de la compañía que cotizan en Hong Kong cayeron hasta 13,5%, acumulando un retroceso de más de 80% este año. Las acciones de su filial de vehículos eléctricos perdieron hasta 22,7%.
“Si se paga o no, no cambiará la incertidumbre”, dijo Michel Löwy, director ejecutivo de SC Lowy, un grupo de inversión con sede en Hong Kong. "A menos que haya alguna forma de intervención central y se agregue liquidez significativa al grupo, tiene que haber una reestructuración".
Evergrande inyectó un rayo de esperanza en las operaciones de Asia el miércoles cuando anunció que había llegado a un acuerdo con los tenedores de bonos locales para un pago de intereses por separado que también vencía el jueves sobre un bono denominado en yuanes, pero la empresa no proporcionó detalles específicos.
Riesgo de contagio
Evergrande enfrenta otros plazos, incluido un pago de US$ 45 millones que vence el miércoles de un bono a 2024. Tiene un total de alrededor de US$ 20 mil millones en deuda pendiente en los mercados internacionales.
Dentro de China, está lidiando con sus obligaciones con los inversionistas minoristas en productos de gestión patrimonial, que la semana pasada se reunieron en su sede de Shenzhen para protestar, así como con los compromisos con los proveedores y contratistas en sus cientos de proyectos de desarrollo en China.
"Si los inversionistas extraterritoriales obtienen un acuerdo de diez a 15 centavos por encima del precio de negociación actual, creo que la gente simplemente seguirá adelante con su vida", dijo un veterano inversor en deuda china, y agregó que las autoridades probablemente usarían a Evergrande para enviar un mensaje a otros desarrolladores.
Un reporte del banco de inversión chino CCB International dijo que los riesgos derivados de Evergrande son "manejables", pero agregó que "el riesgo de contagio se ha extendido desde el financiamiento a la venta de terrenos, ventas de propiedades, entregas de proyectos y los precios de viviendas".
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