Tras varios meses de suspenso y elucubraciones de distinto tipo, finalmente ayer el presidente Sebastián Piñera dio a conocer en cadena nacional los lineamientos de la reforma tributaria que enviará el Ejecutivo en los próximos días al Congreso.
Tras una semana de intensas reuniones con dirigentes de la Alianza por Chile para asegurar la viabilidad del proyecto en Valparaíso, el mandatario inició su alocución dando un detallado análisis del estado de la educación en Chile y destacando los progresos que ha conseguido su administración en los distintos niveles educacionales, particularmente en el área pre escolar, garantizando cobertura gratuita y de calidad a los niños pertenecientes al 60% de los hogares más vulnerables y de clase media.
Además, detalló el proyecto que centra en el Estado la administración de los créditos para la educación y que saca a la banca del otorgamiento de los créditos. “Hemos heredado un mal sistema de financiamiento de la educación superior. Un sistema de becas insuficiente y que discrimina a los estudiantes de la educación técnico profesional y universitaria privada. Y un sistema de créditos que además de discriminarlos, ha generado deudas muchas veces excesivas, e incluso agobiantes. Esta reforma corregirá estos problemas y garantizará becas a todos los estudiantes de universidades, institutos y centros de formación técnica que tengan mérito y pertenezcan al 60% de los hogares vulnerables y de clase media”, afirmó el mandatario.
A partir de ello, Piñera reconoció que en la situación actual el Estado no puede financiar esos cambios y afirmó que la reforma educacional “requiere una reforma tributaria que nos permita financiarla en forma seria, responsable y sustentable. El 100% de los mayores recursos que recaude esta reforma tributaria se destinarán a financiar la reforma educacional”, afirmó el mandatario.
En esa línea, aseguró que la recaudación fiscal aumentará en un rango entre US$ 700 millones y US$ 1.000 millones, lo que implica entre un 1,7% y un 2,4% de la recaudación tributaria del año 2011, o bien a un 0,5% del PIB del año pasado.
Esta meta de recaudación se completará con las siguientes medidas:
Impuesto de
primera categoría
Era uno de los puntos más claros de esta iniciativa. El propio mandatario lo había confirmado. El tributo, que aumentó transitoriamente desde 17% a 20% en 2010 a causa del terremoto, tenía como destino bajar en 2012 a 18,5%, pero las necesidades del Estado dijeron otra cosa.
“A las empresas se les requerirá un esfuerzo adicional, subiendo la tasa de impuesto permanente sobre las utilidades del 17% al 20%. Y, adicionalmente, se corregirán o eliminarán una serie de franquicias tributarias o distorsiones que reducen la recaudación y que no se justifican”, afirmó el presidente en su discurso al país.
Pese a ello, también hay un guiño al sector productivo al afirmar que la reforma también contiene medidas para potenciar el crecimiento y la productividad de manera de aumentar la competitividad de Chile a largo plazo. “Para seguir potenciando la integración comercial con el resto del mundo y el desarrollo de nuestras exportaciones, que tanto dividendo le ha dado a Chile en los últimos 25 años, vamos a avanzar gradualmente eliminando los aranceles aduaneros, y de esa forma reducimos los costos internacionales de las empresas y elevamos el tipo de cambio real. También se están adoptando, a través de las disposiciones administrativas y legales correspondientes, medidas destacadas del Impulso Competitivo como la eliminación del impuesto al software, la simplificación de los procedimientos para el acceso de las pymes al beneficio tributario a la reinversión de utilidades (14 quáter), el perfeccionamiento de la normativa para la exportación de servicios, entre otras”, afirmó Piñera.
Rebaja en impuestos personales y beneficios en educación
El Ejecutivo reducirá de ocho a cinco los tramos de salario que pagan impuesto y se establece una reducción de las tasas marginales de sus impuestos a la renta
De acuerdo a lo planteado ayer por el mandatario la reforma significará un alivio tributario para las personas, al reducir las tasas marginales de sus impuestos a la renta. Estas rebajas fluctuarán entre el 10% y el 15%, correspondiendo naturalmente la mayor rebaja a los grupos de menores ingresos.
Adicionalmente, se establecerá un incentivo a la educación y a la familia, al permitir a las familias de clase media descontar de sus impuestos hasta el 50% de los gastos que efectúan en la educación de sus hijos.
“Una familia que pague impuestos a la renta, en la que trabaja el jefe de hogar y su ingreso es de $ 800.000 mensuales, obtendrá un beneficio anual en torno a los $ 130.000, al descontar parte del gasto que realice en educación preescolar o escolar de sus impuestos”, explicaron ayer desde el Ejecutivo.
“Esta reforma también busca contribuir en la construcción de una sociedad de valores, apoyando a la familia y promoviendo la protección del medio ambiente y la vida saludable”, acotó.
Rebaja en
impuesto
al crédito
De acuerdo al mensaje de ayer, una familia de clase media, que adquiera una vivienda de UF 2.000, se ahorrará cerca de $ 120.000 al momento de obtener su crédito. Esto de acuerdo a la rebaja sustancial del impuesto de timbres y estampillas que originalmente estaba fijado en 0,6% y ahora quedará en 0,2%. A juicio del gobierno, esto beneficiará a más de 2,8 millones de personas, quienes tendrán rebajas bien significativas al optar a créditos de todo tipo, como consumo, hipotecarios, entre otros, y también a más de 390 mil pequeñas y medianas empresas.
Impuestos
verdes
La reforma también incorpora los llamados impuestos verdes, a aquellos bienes cuya disposición final afecta negativamente el medio ambiente y la calidad de vida de la gente, e incorpora subsidios verdes para fomentar el reciclaje de esos productos. “Así, se establecerán un sistema de impuestos a la primera venta y subsidios al reciclaje, para productos como envases, pilas, aceites y lubricantes, entre otros”, afirmó Piñera.
Alcoholes de
mayor graduación
“Adicionalmente, dado su impacto en la salud, se incrementará el impuesto a los licores de mayor graduación de alcohol”, dijo ayer Piñera. En ese sentido, señaló que ”vamos a diferenciar el impuesto a los alcoholes según su grado alcohólico, aumentándolo en el caso de aquellos de mayor graduación como el gin, el tequila y el whisky. Con esto no queremos impedir a la gente consumir según sus preferencias, sino que se busca incentivar estilos de vida más saludables”, afirmaron desde el Ejecutivo.
Precios de los combustibles
y bono
“Estoy muy consciente del impacto que las alzas en los precios internacionales del petróleo ha significado en los precios de los combustibles en Chile, y también del duro efecto en el presupuesto y bienestar de las familias chilenas. Por estas razones, junto con esta reforma, potenciaremos y fortaleceremos el sistema de protección de los consumidores frente a alzas en el precio de los combustibles, creando un mecanismo de impuestos variables, de forma tal que cuando el precio de los combustibles sea alto, los impuestos bajen, el Fisco recaude menos y los consumidores paguen menos. Y lo contrario ocurra cuando el precio de los combustibles sea bajo. Este mecanismo sin duda va a atenuar las fluctuaciones en el precio de los combustibles y va a significar un alivio al presupuesto de las familias”, afirmó el presidente.
Agregó junto con ello que “también en los próximos días daremos a conocer un bono que va a atenuar la situación generada por el alza de los combustibles a los taxistas y a los transportistas escolares”.
Piñera afirmó que “estas reformas que hoy anunciamos son posibles porque hemos realizado una conducción económica seria, responsable. Es esto lo que nos ha permitido, junto al esfuerzo de todos los chilenos, que en un mundo golpeado por las crisis, las recesiones económicas y la inestabilidad, Chile haya recuperado, y con fuerza, su capacidad de crecer, de crear empleos, de mejorar los salarios y, al mismo tiempo, mantener sólidos y sanos sus equilibrios económicos. Sin duda, todos quisiéramos ir más rápido, pero debemos construir sobre roca y no sobre arena, y nunca generar falsas ilusiones que significan pan para hoy y hambre para mañana. Esa lección la han aprendido con dolor, muchos países”.
Continuó con un mensaje “a los jóvenes del país” en el que señaló que “la sociedad entera está haciendo un enorme esfuerzo para financiar esta Reforma Educacional. Sin duda todos debemos comprometernos, pero el éxito de esta Reforma Educacional depende básicamente de la voluntad, el esfuerzo y el compromiso de nuestros estudiantes. Al fin y al cabo, se trata de sus vidas, se trata de sus futuros”.
Y finlizó con un llamado “encarecido” a “todos los parlamentarios, de Gobierno y de oposición, que aprueben oportunamente tanto la Reforma Educacional como la Reforma Tributaria, las cuales estoy seguro nos permitirán dar un gran salto adelante hacia ese Chile con el cual siempre hemos soñado, ese Chile y esa sociedad más libre, más próspera, más justa, mejor educada y también más feliz”.
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