Lagos: "En el estado que se encuentra hoy el proyecto, hay que decir no" a HidroAysén
Un brusco cambio de opinión tuvo el ex mandatario. Ahora identifica tres "graves" inconvenientes de la iniciativa.
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Un inesperado cambio opinión tuvo el ex presidente Ricardo Lagos sobre el controvertido proyecto eléctrico HidroAysén. Luego que el domingo señalara que era necesario para el país, ahora el ex mandatario advierte que en la actuales condiciones no debiera aprobarse su construcción.
“La forma como se ha encarado el tema de HidroAysén me parece inadecuada para el interés superior de Chile. No se trata de decir sí o no a HidroAysén. En el estado que se encuentra hoy el proyecto, hay que decir no”, dijo el mandatario en el blog elquintopoder.cl.
Lagos, quien fuera designado por la ONU como enviado especial para el cambio climático, aclaró eso sí que ello no quiere decir que no se tengan que aprovechar los recursos hídricos del país, pero que debe ir en concordancia con la realidad ambiental y las necesidades del país.
En ese contexto, Lagos identifica tres “graves” deficiencias en el proyecto HidroAysén.
La primera es que, “hasta donde yo sé”, no existen reservas de agua suficiente para poder desarrollar la agricultura, hecho que par Lagos “probablemente” va a ser indispensable en esa parte de Chile.
“Si continúa el calentamiento global y el desplazamiento hacia el sur de la agricultura chilena, este será un tema fundamental, y así lo señalé como presidente, en Cochrane, el 1 de febrero de 2006”, expresó Lagos.
El segundo inconveniente para el ex mandatario es que no es razonable decir sí a la construcción de represas cuando la línea de transmisión de la misma todavía no está aprobada.
“Es un solo proyecto y por lo tanto no debe aprobarse parcialmente”, puntualizó.
El tercer punto, “tal vez lo más importante”, según Lagos, es que es indispensable que Chile defina una política clara de apoyo a las Energías Renovables no Convencionales.
“Hasta ahora no existe nada en ese sentido por parte del actual gobierno. Este deja actuar solo a las fuerzas del mercado y así la matriz se seguirá carbonizando, ya que es la energía más barata. El mercado no mide el daño ambiental”, expresó en el blog.