Dudas ante cambios en Consejo de Transparencia abre nuevo conflicto político en el gobierno
Ejecutivo tiene hasta el 28 de octubre para lograr que el Senado apruebe a los nuevos consejeros.
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Por C. Betancourt / P. aburto
Un nuevo conflicto se instaló en La Moneda luego de la petición de renuncia al presidente del Consejo de Transparencia, Raúl Urrutia (RN) y al consejero Juan Pablo Olmedo (PPD).
Su salida se dio en el marco de una dipusta legal entre este organismo y la Fundación Integra -que depende de la Primera Dama, Cecilia Morel- por aclarar el destino de donaciones realizadas a esta entidad y los detalles de la planta y sus honorarios.
Otro tema que habría “incomodado” al gobierno se relaciona con la postura del consejo respecto a los correos electrónicos entre funcionarios del Estado referidos a asuntos públicos. A ello se suma la insistencia por parte de este organismo de solicitar más recursos para su funcionamiento en el presupuesto 2012.
El peor escenario para el Ejecutivo sería que los nuevos consejeros no estén definidos antes del 28 de octubre, plazo límite para que culmine este proceso. Ello considerando, además, que las nominaciones presidenciales requieren la aprobación de dos tercios del Senado.
Un escollo importante luego de las críticas lanzadas por algunos sectores de la Alianza debido a la forma en que se hizo pública la decisión de no renovar a Raúl Urrutia y Juan Pablo Olmedo.
Y si los nombres de nuevos consejeros no están el 28 de este mes, el consejo en la práctica quedaría paralizado puesto que no podría sesionar con sólo dos integrantes.
Reparos de Larraín
Sus reparos a la forma en cómo fue informado Urrutia de su alejamiento del Consejo de Transparencia manifestó ayer el presidente de RN, el senador Carlos Larraín, tras reunirse con el vocero Andres Chadwick . Larraín dijo que su “deseo es que estos anuncios se hagan en consideración de las personas involucradas y los partidos porque Raúl Urrutia es miembro de RN de antigua data, que ha servido lealmente al Estado y quisiera que él salga premiado y no en tela de juicio”, afirmó. Es más, para el senador era necesario haberle preguntado “con calma y tiza, si acaso esto nos parecía adecuado y haber fundamentado mejor la petición de renuncia”. Comentó que se ha dicho que Urrutia “ha sido un poco inquisitivo de más”, y la verdad, añadió, “que en su rol debe ser lo más inquisitivo posible. Ese el espíritu de la Ley de Transparencia y de este Consejo que se creó. Tener un presidente del Consejo que no pregunta y no hace preguntas difíciles no sirve para nada”, refrendó.
Respuesta del gobierno
Saliendo al paso de estas críticas, Chadwick reiteró lo dicho por su par de la Segpres, Cristián Larroulet -de quien depende el Consejo- en orden a que las razones para los cambios tienen que ver con que “los cargos en los distintos tipos de consejos no se vayan haciendo perpetuos en determinadas personas”.
En tanto, el presidente de Chile Transparente, Juan Carlos Délano, manifiestó su inquietud respecto del cambio. ”Es raro cuando el Consejo genera ruido. Me parece que es un proceso no muy transparente, no muy claro. Si se mira a otras instituciones como el Congreso, partiendo por los diputados y senadores, ahí sí que se perpetúan en sus cargos”, sentenció.