El desafío del 5g como una plataforma de nuevos negocios

"La pandemia nos demostró que la digitalización no es solo una necesidad de las empresas de tecnología, es un requisito para seguir funcionando", comienza diciendo Andrés Roepke, country manager de VMware Chile, Perú y Bolivia.
Y es que el país y el mundo llevan más de un año batallando con lo que significa vivir en medio de una crisis sanitaria, lo que ha demandado esfuerzos desde todas las industrias. Las telecomunicaciones no han sido la excepción, sino por el contrario: el sector vio aumentada con creces la demanda por sus servicios de Internet y redes, pues un gran número de empresas debió asumir una transformación digital de sus procesos sobre la marcha.
Aunque esta transformación se adelantó y no fue desarrollada bajo las pautas que los expertos en el área preveían, aún quedan aspectos que proyectar en el mediano plazo en el área de telecomunicaciones, como la llegada del 5G. Esta tecnología traerá tendencias como redes virtualizadas, tecnologías en la nube, señal en todo el mundo y "la computación del borde, que permiten procesar los datos más cerca de los usuarios -incluso a gran escala-, logrando una mejor experiencia de conexión y procesamiento de datos", analiza Roepke.
Es por eso que el ejecutivo cree que digitalizar es un requerimiento para crecer, ser ágiles y resilientes, sobre todo en circunstancias como la que vive Chile en medio de su segunda ola de contagios.
En ese sentido, "el 5G permite romper barreras o límites para utilizar los recursos de tecnologías de punta que existen, como el Cloud y sus servicios de valor al negocio", ejemplifica, agregando otros casos como la analítica y el modelamiento de datos, sistemas modernos de atención a clientes, "y mucho otros que hoy están limitados a temas físicos".
Asimismo, explica que la industria, con la llegada de las redes de quinta generación, tendrá la oportunidad de crear más negocios transversales y digitales, lo que podría enfrentarse con la dificultad de cambiar el modelo de negocios.
"No se trata solo de generar un tráfico más rápido o de mayor capacidad, sino de cómo agregar valor a esos datos", analiza. Para ello, generar nuevos productos que le den valor a estas compañías es el camino y será sinónimo de un incremento de las ganancias.
De hecho, en un reporte del World Economic Forum (WEF) sobre el impacto del 5G, el organismo destaca un estudio de IHS Markit que estima que para el año 2035 sería posible obtener US$ 13.200 millones en valor económico global y generar 22,3 millones de empleos, "solo en la cadena de valor global relacionada con 5G".

Los desafíos en el camino
A partir de mayo de 2020, las empresas adjudicatarias del espectro otorgado durante la licitación 5G comenzarán sus despliegues para que, en un lapso de tres años, esta tecnología esté en funcionamiento.
De hecho, proyecciones de Ericsson, indican que hacia 2024 habrá más de 1.500 millones de personas conectadas a la red 5G. Es así que Andrés Roepke estima que las empresas de telecomunicaciones necesitarán disolver los silos tecnológicos que se crearon en el tiempo, donde VMware, dice, podría ser un partner estratégico al proveer la base digital para hacer los nuevos productos de la industria: "Hoy el negocio tradicional de estas compañías cayó abruptamente, ahora lo importante es cómo generar analítica de datos para entregar soluciones".
Una de esas soluciones sería la generación de microservicios que brinden productos veloces con un "valor de alto impacto" y beneficio para los clientes.
"La tecnología digital de VMware, al estar basada completamente en software, cambia el paradigma de grandes inversiones de hardware por una tecnología modular y flexible que aprovecha las metodologías ágiles de desarrollo y con ello el despliegue automático de aplicaciones y servicios sin generar dependencias de la infraestructura", puntualiza Roepke.
Todo esto implica una evolución en la infraestructura de telecomunicaciones, agrega el ejecutivo.
"Es por esto que VMware ha extendido su plataforma de infraestructura, permitiendo así que el Centro de Datos definido por software sea ahora capaz de hacer funcionar, no solo máquinas virtuales, sino contenedores y clusters de contenedores con base en el open-source Kubernet, una arquitectura ampliamente adoptada para la orquestación de aplicaciones y funciones de red, donde dos de los tres creadores de kubernetes están actualmente trabajando en nuestra empresa".

Ciberseguridad y el futuro
Con el vuelco digital que se ha vivido desde hace un año, los expertos han insistido incansablemente en la importancia de generar inversiones respecto a ciberseguridad. Y es que ahora, en un mundo mucho más avanzado en la transformación digital, en el que las redes 5G se incluirán en el corto plazo, se prevé un desafío mayor en cuanto a la protección de información.
Según Roepke, es fundamental y básico que estas redes cuenten con seguridad intrínseca desde su concepción y que ésta sea ajustable. "Se trata de una estrategia para aprovechar su infraestructura, arquitectura y puntos de control de nuevas formas y en tiempo real, de modo que pueda pasar de una postura de seguridad reactiva a una posición de fuerza proactiva", precisa.
Es por eso que es hora de detenerse y repensar cómo construir y operar redes de telecomunicaciones seguras para evitar crear arquitecturas 5G que no sean capaces de adaptarse a la agilidad y flexibilidad que requieren las nuevas necesidades de negocios, añade, acotando que "las arquitecturas existentes complican la capacidad de aplicar parches, es por eso que un enfoque integral de la seguridad no puede basarse únicamente en la seguridad de los componentes".
Ahora, ¿se puede seguir proyectando nuevas nuevas redes como el 6G? Según el experto de VMware, esto estará vigente dentro de los próximos 10 años y llegará con velocidades estimadas 100 veces más rápidas que las del 5G. Y, también, con nuevos desafíos para la industria.

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Andrés Roepke, 
country manager de VMware Chile, Perú y Bolivia.