Pérez: El principal objetivo es recuperar la confianza entre concesionarios y el MOP
Clemente Pérez, además, señala que hay que modificar el sistema de incentivos para que las empresas propongan nuevos proyectos. "Está demostrado que el sistema de incentivos para los privados es bajo", dice.
Por: | Publicado: Martes 8 de febrero de 2011 a las 05:00 hrs.
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Andrés Pozo B.
A pocos días de haber asumido como nuevo presidente de la Asociación de Concesionarios de Obras de Infraestructura Pública (Copsa), Clemente Pérez, plantea sus objetivos como representante de las concesionarias. "El principal desafío es recuperar plenamente la confianza entre concesionarios y Ministerio de Obras Públicas (MOP)", explica Pérez y agrega que en estas sociedades público-privadas "tiene que haber una relación de confianza mutua y recíproca exigencia".
-¿Cómo estaba esta relación?
-Durante algún tiempo esta relación se vio debilitada y para mí el principal objetivo es que vuelvan a solidificarse y vigorisarse los vínculos entre el Estado y las sociedades concesionarias. Lo segundo es recuperar la confianza de los usuarios de las concesionarias.
-¿Cómo se perdió la confianza con el Estado?
-Fue en el tiempo donde se revisó la ley de concesiones. Hubo toda una crítica a los convenios complementarios y a las resoluciones de los tribunales de las comisiones conciliadoras, del tribunal arbitral y una disminución muy fuerte de las inversiones, casi una paralización de la industria. Pero lo interesante es ver que hoy hay signos de una industria que viene con mucha fuerza.
Resurge la industria
Pérez, quien se desempeñó como subsecretario de Obras Públicas y también fue presidente de Metro, explica que las concesiones han traído ahorros al Estado. Según cálculos de Copsa, en las últimas cuatro licitaciones el Estado ha ahorrado US$ 185 millones, si se compara la oferta más baja frente al presupuesto oficial de referencia de la autoridad.
-¿En qué está la industria?
-Lo que yo veo aquí es que desde los últimos dos años a la fecha, hemos tenido una industria que está resurgiendo con mucha fuerza. A fines del 2008, 2009 y 2010, estamos viendo una industria sumamente activa con proyectos, sumo interés por construir y desarrollar obras.
-De todos modos han habido críticas en la concesión de cárceles, por ejemplo, donde hubo sobrecostos.
-Lo ideal es que no haya sobrecostos y ahí hay un gran aprendizaje institucional. Lo que tuvimos en las primeras cárceles fue un proceso lleno de deficiencias, pero que también forma parte de un aprendizaje. Dicho esto, los valores por metro cuadrado resultaron ser más bajo en las cárceles concesionadas, con sobrecostos incluidos, que en las cárceles construidas directamente por el Estado.
Mayores beneficios
Según Pérez, el terremoto manifestó la conveniencia de las concesiones. Si bien se evidenció que aún la infraestructura es precaria, destaca que las obras concesionadas, "en menos de un año y a costa de los propios concesionarios y de sus seguros, la mayoría de las obras ya está prácticamente en pie. Mientras que la obra pública tradicional, que no está asegurada, siguen en parte en el suelo, y sujeta a requerimientos de fondos por parte del Estado y largos procesos de evaluación social y reconstrucción".
-¿Hay que seguir ampliando el sistema de concesiones?
-Respecto de carreteras y autopistas todavía falta por hacer. Hay un conjunto de obras que está analizando el MOP y que sería bueno implementar lo antes posible, para que las carreteras tuvieran el mayor estándar. Lo razonable sería que se resolviera lo antes posible, y ver qué obras se van a hacer y cuáles no.
-¿A qué otras áreas podrían abrirse?
-Las cárceles es un tema, donde desgraciadamente el incendio en San Miguel demuestra que la infraestructura en Chile aún es muy precaria en esta materia. El tema de los hospitales es otro tema interesante, donde el terremoto dejó claro las falencias y donde los concesionarios pueden hacer un aporte real. Hay otros temas que también son relevantes, como los parques urbanos y los estacionamientos. También el representante de Copsa apunta a desarrollar mecanismos de concesiones que funcionen a menor escala, como la municipal.
Agilizar inversiones
-
El MOP tiene un plan bastante ambicioso, pero ¿falta acelerar el proceso de inversión?
-Aún es muy temprano para pronunciarse. Los últimos meses han sido dinámicos, pero son algunos proyectos que venían avanzados del ministro Bitar. Creo que van a ser los próximos meses los que van a marcar la respuesta. Veremos si se ha logrado dinamizar el sistema de concesiones por parte del MOP y ahí creo que hay un barco difícil de mover.
-¿Y la rapidez con que se sacan los proyectos?
-El sistema de concesiones de un tiempo a esta parte está un poco lento. Tengo la impresión de que el ministerio va a ser capaz de mover este buque, pero es pesado y es importante hacer ajustes institucionales para hacerlo más ágil. Sobre las preocupaciones de la industria, señala que un tema importante es la modificación del sistema de incentivos para iniciativas privadas. "Para que haya buenos proyectos, no hay que apostar el 100% a la creatividad de los funcionarios del MOP, sino que también es bueno que haya incentivos para que privados presenten proyectos. Está demostrado que el sistema de incentivos para los privados es bajo", dice.
A pocos días de haber asumido como nuevo presidente de la Asociación de Concesionarios de Obras de Infraestructura Pública (Copsa), Clemente Pérez, plantea sus objetivos como representante de las concesionarias. "El principal desafío es recuperar plenamente la confianza entre concesionarios y Ministerio de Obras Públicas (MOP)", explica Pérez y agrega que en estas sociedades público-privadas "tiene que haber una relación de confianza mutua y recíproca exigencia".
-¿Cómo estaba esta relación?
-Durante algún tiempo esta relación se vio debilitada y para mí el principal objetivo es que vuelvan a solidificarse y vigorisarse los vínculos entre el Estado y las sociedades concesionarias. Lo segundo es recuperar la confianza de los usuarios de las concesionarias.
-¿Cómo se perdió la confianza con el Estado?
-Fue en el tiempo donde se revisó la ley de concesiones. Hubo toda una crítica a los convenios complementarios y a las resoluciones de los tribunales de las comisiones conciliadoras, del tribunal arbitral y una disminución muy fuerte de las inversiones, casi una paralización de la industria. Pero lo interesante es ver que hoy hay signos de una industria que viene con mucha fuerza.
Resurge la industria
Pérez, quien se desempeñó como subsecretario de Obras Públicas y también fue presidente de Metro, explica que las concesiones han traído ahorros al Estado. Según cálculos de Copsa, en las últimas cuatro licitaciones el Estado ha ahorrado US$ 185 millones, si se compara la oferta más baja frente al presupuesto oficial de referencia de la autoridad.
-¿En qué está la industria?
-Lo que yo veo aquí es que desde los últimos dos años a la fecha, hemos tenido una industria que está resurgiendo con mucha fuerza. A fines del 2008, 2009 y 2010, estamos viendo una industria sumamente activa con proyectos, sumo interés por construir y desarrollar obras.
-De todos modos han habido críticas en la concesión de cárceles, por ejemplo, donde hubo sobrecostos.
-Lo ideal es que no haya sobrecostos y ahí hay un gran aprendizaje institucional. Lo que tuvimos en las primeras cárceles fue un proceso lleno de deficiencias, pero que también forma parte de un aprendizaje. Dicho esto, los valores por metro cuadrado resultaron ser más bajo en las cárceles concesionadas, con sobrecostos incluidos, que en las cárceles construidas directamente por el Estado.
Mayores beneficios
Según Pérez, el terremoto manifestó la conveniencia de las concesiones. Si bien se evidenció que aún la infraestructura es precaria, destaca que las obras concesionadas, "en menos de un año y a costa de los propios concesionarios y de sus seguros, la mayoría de las obras ya está prácticamente en pie. Mientras que la obra pública tradicional, que no está asegurada, siguen en parte en el suelo, y sujeta a requerimientos de fondos por parte del Estado y largos procesos de evaluación social y reconstrucción".
-¿Hay que seguir ampliando el sistema de concesiones?
-Respecto de carreteras y autopistas todavía falta por hacer. Hay un conjunto de obras que está analizando el MOP y que sería bueno implementar lo antes posible, para que las carreteras tuvieran el mayor estándar. Lo razonable sería que se resolviera lo antes posible, y ver qué obras se van a hacer y cuáles no.
-¿A qué otras áreas podrían abrirse?
-Las cárceles es un tema, donde desgraciadamente el incendio en San Miguel demuestra que la infraestructura en Chile aún es muy precaria en esta materia. El tema de los hospitales es otro tema interesante, donde el terremoto dejó claro las falencias y donde los concesionarios pueden hacer un aporte real. Hay otros temas que también son relevantes, como los parques urbanos y los estacionamientos. También el representante de Copsa apunta a desarrollar mecanismos de concesiones que funcionen a menor escala, como la municipal.
Agilizar inversiones
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El MOP tiene un plan bastante ambicioso, pero ¿falta acelerar el proceso de inversión?
-Aún es muy temprano para pronunciarse. Los últimos meses han sido dinámicos, pero son algunos proyectos que venían avanzados del ministro Bitar. Creo que van a ser los próximos meses los que van a marcar la respuesta. Veremos si se ha logrado dinamizar el sistema de concesiones por parte del MOP y ahí creo que hay un barco difícil de mover.
-¿Y la rapidez con que se sacan los proyectos?
-El sistema de concesiones de un tiempo a esta parte está un poco lento. Tengo la impresión de que el ministerio va a ser capaz de mover este buque, pero es pesado y es importante hacer ajustes institucionales para hacerlo más ágil. Sobre las preocupaciones de la industria, señala que un tema importante es la modificación del sistema de incentivos para iniciativas privadas. "Para que haya buenos proyectos, no hay que apostar el 100% a la creatividad de los funcionarios del MOP, sino que también es bueno que haya incentivos para que privados presenten proyectos. Está demostrado que el sistema de incentivos para los privados es bajo", dice.