De acuerdo con los resultados de la encuesta de Plaza Pública Cadem correspondiente a la segunda semana de junio, la aprobación a la gestión de la Presidenta siguió descendiendo para ubicarse en 24% -su peor registro hasta el momento-, mientras que su desaprobación se empinó a un 65%, con lo que regresó a los niveles previos a la cuenta a la nación del 21 de mayo, que implicó una fugaz mejoría en las mediciones.
Según se ha explicado, correlacionado con lo anterior todas las reformas vuelven a alcanzar su punto más alto de rechazo: un 58% de desacuerdo en el caso de la tributaria; 50% en la laboral, y 69% en el de la educacional.
Así, los datos de esta encuesta -en línea con otros sondeos- ponen de manifiesto el persistente deterioro en la popularidad de la Mandataria y a la manera en que se están diseñando e implementando las reformas, lo que debe llamar a una profunda reflexión por parte de las autoridades. Cabe recordar que desde distintos sectores se esperaba que el gobierno comenzara a retomar las confianzas y enmendar errores tras el cambio de gabinete, pero hasta el momento las encuestas no parecen mostrar un giro respecto de la tendencia observada en los últimos meses.