Aun cuando el precio del cobre se recuperó ayer a US$ 2,28 por libra, desde el desplome a US$ 2,21 por libra del lunes, en medio del derrumbe bursátil en China y los temores globales sobre la economía del gigante asiático, se mantiene en un deprimido nivel que inquieta en este sector clave de la economía y presiona las cuentas fiscales.
En efecto, según ha reconocido a este medio Joaquín Villarino, presidente del Consejo Minero -que agrupa a las mayores firmas de cobre que operan en Chile-, si bien no se puede hablar de una crisis en la industria, la baja del cobre sí ha encendido "ciertas señales de alerta" y ha advertido que si el precio tendencial en vez de US$ 2,7 ó US$ 2,8 por libra que anticipan los expertos comienza a consolidarse en US$ 2,3 por libra, sí "empezaría a ser preocupante la viabilidad de las faenas de la gran minería".
Villarino ha indicado que además de los planes de reducción de costos de las mineras, el país debe avanzar en evitar costos artificialmente altos que afectan la competitividad, por lo que el Consejo Minero ha sugerido mejoras en las reformas tributaria, laboral o los proyectos de biodiversidad o glaciares. Se trata de puntos razonables que deberían llamar a la reflexión a las autoridades.