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Rebote encubierto

¿Cuántas veces hemos escuchado los pronósticos pesimistas que la economía mundial dejará de crecer, o que caerá en una recesión otra vez? Se desacelera China, se descompone Europa...

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¿Cuántas veces hemos escuchado los pronósticos pesimistas que la economía mundial dejará de crecer, o que caerá en una recesión otra vez? Se desacelera China, se descompone Europa, se estancan los Estados Unidos, etc. Esas imágenes abarcan una parte tan grande del espacio noticiero que casi no caben otras imágenes. Con razón se presta atención a esos derrumbes potenciales, porque si llegan a pasar sería grave. 


Pero los escenarios pesimistas han atraído tanta atención que muchos observadores no han notado, o no han tomado suficientemente en cuenta, una transformación enorme que está pasando en un sector de gran importancia. Es el sector de la energía, y el sector de la generación de electricidad en particular.

El costo de generar electricidad está bajando rápidamente. No se puede ver las dimensiones exactas de este fenómeno, porque apenas está comenzando, pero ya se ve que las dimensiones son enormes, tan grandes como para transformar los precios relativos y efectuar una reponderación de la ventaja comparativa a nivel mundial.

El dato más ampliamente diseminado es que en el plazo de los últimos seis meses, el precio del gas natural en Norteamérica ha caído a la mitad. A la misma vez, el precio del carbón para plantas eléctricas ha bajado ligeramente, posiblemente por el efecto de la sustitución. Al mismo tiempo, el costo de la electricidad generada por molinos de viento y fincas de paneles solares se ha reducido tanto que compite con la electricidad generada por las plantas que queman carbón o gas natural.

Por décadas ha sido el sueño que las tecnologías nuevas alcancen a ser competitivas centavo por centavo con las plantas que queman carbon o gas natural. Ese momento ya llegó, pero no se ha incorporado en muchos marcos analíticos todavía. 
La caída en el costo de la electricidad no se ha difundido a todas partes del mundo todavía y tardará en llegar a unos rincones. Pero hay evidencia que la nueva tecnología ya está llegando a la India. Todos los años el gobierno de la India compra paneles solares por licitación pública. Se reportó que el precio que el gobierno pagará este año es 30% más bajo que el precio de un año antes. 
Si el costo de la electricidad se baja, las implicancias son tantas que no se pueden enumerar, pero una de ellas sería que la economía mundial podrá crecer más rápidamente que los pronósticos indican.

Y los países emergentes podrían beneficiarse, porque muchos enfrentan el limitante de la escasez crónica de electricidad y del costo alto de ampliar la capacidad de generarla. Otra implicacia es el impacto positivo sobre la demanda por el cobre.

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