Con renovado optimismo es posible observar que la agenda de proyectos energéticos en el Congreso ha avanzado en las últimas semanas. Evidentemente, el temor a que la magnitud del problema energético empañe los planes del siguiente gobierno, ha llevado a aunar posiciones. Entre los proyectos en discusión se encuentra la posibilidad de incluir interconexiones entre sistemas eléctricos independientes en el estudio de transmisión troncal y, en caso que sean recomendadas, se incorporen en el Plan de Expansión Anual que elabora la CNE.
Resulta entendible que la autoridad disponga de tales atribuciones. Hoy en día es necesario que el regulador tenga la posibilidad de proponer una interconexión troncal entre sistemas, siempre que los beneficios sociales netos asociados sean relevantes. No es posible ni apropiado esperar a que un proyecto de estas características sea rentable en forma privada. Esto porque puede ocurrir que ello nunca suceda o porque de serlo, se llevaría a cabo en forma tal que los efectos positivos sobre la sociedad sean limitados en orden a incrementar los beneficios privados.
Un estudio publicado en junio por la CNE muestra que los beneficios sociales de la interconexión SIC-SING superan largamente a los costos del proyecto. Dichos beneficios vienen dados fundamentalmente por un aumento en la competencia en el mercado de contratos así como una reducción en el riesgo de contratación por menor variabilidad del precio spot. La competencia aumenta por dos vías. En primer lugar, los generadores existentes en un sistema podrían competir por suministrar en ambos sistemas. En segundo lugar, el tamaño del mercado aumenta, haciéndose más atractivo para futuros entrantes y para incumbentes que quieran aumentar su participación. Una interconexión no solo aumentaría el número de competidores, sino que favorecería la intensidad de la competencia entre los actuales generadores, reduciendo el poder de mercado existente.
Hay evidencia de que actualmente la competencia es escasa en el mercado de contratos de suministro eléctrico. La indexación de precios a costo marginal en contratos libres, que implica la completa transferencia del riesgo en generación hacia los clientes, es un síntoma de aquello.
La interconexión SIC-SING no solucionará todos los problemas del sector. Según estimaciones de la autoridad no estaría lista sino hasta el 2019. Pero dado que su anuncio impactaría en los próximos contratos que se firmen, se hace urgente su aprobación.