Vacunas siguen apuntalando ánimos: Santander mejora proyección de PIB para Chile hasta 6,5%
La revisión al alza de hasta dos puntos porcentuales también responde a un cierre más dinámico a fines de 2020 y a un escenario externo más favorable, precisa la entidad.
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Las críticas al nuevo cronograma de vacunación parecen no estar teniendo eco en el plano económico, y, de hecho, son cada vez más las entidades que gracias al proceso de inoculación mejoran sus expectativas para la actividad nacional.
Santander aplicó una sustantiva corrección a las proyecciones de crecimiento para Chile, cuyo Producto Interno Bruto (PIB) crecería entre 5,5% y 6,5% este año, dato revisado al alza desde el 4,5% previsto anteriormente.
Además de que 2020 tuvo un cierre más positivo de lo que se había anticipado, el “rápido y expedito” despliegue del proceso de vacunación fue uno de los factores clave para la revisión al alza. El informe mensual de febrero precisa que “los riesgos para este proceso se ven más acotados, toda vez que el sistema logístico ha respondido de buena manera y los envíos de vacunas se han materializado dentro de los plazos estipulados”.
El tercer punto que destaca Santander para la mejora del panorama es el escenario externo más favorable, que se sustenta, justamente, en el avance de los procesos de inoculación de algunas de las principales economías del mundo.
El reporte también destaca que, para el caso de China, el importante avance de su sector manufacturero y los planes de estímulo le han dado un “nuevo impulso” al cobre, cuyo precio alcanzó máximos en casi una década. Por último, el área encabezada por Claudio Soto agrega que a partir de este año se espera mayor dinamismo de los proyectos de inversión locales, liderados por obras públicas y minería.
No todo es optimismo
Pese a lo bueno, Santander advierte que los riesgos para la recuperación se mantienen, siendo el principal la pandemia. Recordando que la crisis sanitaria aún no termina, la entidad dice que no se puede descartar la aparición de nuevos brotes antes de lograr la inmunidad de rebaño -proyectada para el tercer trimestre-, lo que llevaría a imponer nuevas restricciones.
El informe también alerta sobre el escenario político interno y el “clima de crispación que aún se percibe”, lo cual dice se vio reflejado en lo ocurrido en Panguipulli.
Además, la débil creación de empleo da cuenta de un mercado laboral “aún rezagado”, con todavía cerca de un millón de personas menos trabajando que hace un año.
Tras la sorpresa que dio el IPC en enero, aceleración se explicada por la “abundante liquidez recibida por los hogares e inventarios acotados”, la inflación fue revisada, y si bien el ritmo de las variaciones mensuales debería moderarse, el año cerraría con un alza de 3,3%.
La economía se mantendrá por debajo de su capacidad por un “período prolongado”, por lo que las condiciones monetarias permanecerían expansivas durante todo el año, y la tasa de política monetaria seguiría en su mínimo hasta al menos el segundo semestre de 2022.