Piñera defiende sus reformas estructurales y califica críticas "de mal informadas o mal intencionadas"
El mandatario señaló que reforma tributaria y de pensiones son necesarias para crecer; y dijo que la laboral "no está pensada en favorecer solo a las cúpulas sindicales, sino a los trabajadores".
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Una enérgica defensa realizó el Presidente, Sebastián Piñera, de sus reformas estructurales en materia de pensiones, tributaria y laboral, en el marco de la semana de la construcción, donde dijo que muchas de las críticas a los proyectos corresponden a personas "mal informadas o mal intencionadas".
Piñera planteó que "hay algunos que solo se dedican a criticar, pero que nunca hacen ningún aporte y muchas veces las críticas no son ni bien informadas ni bien intencionadas, tenemos que tener el oído atento a la crítica constructiva, al que detecta problemas con un afán de contribuir a la solución, por eso estamos comprometidos a hacer los esfuerzos como gobierno para lograr que Chile recupere su dinamismo perdido y salir del estancamiento".
Defendió la necesidad de aprobar la reforma tributaria y respecto de la de pensiones indicó que "todos los que dicen que esta reforma no tiene impacto en el corto plazo o están muy mal informados o son muy mal intencionados, cualquiera sea la tesis confunden y engañan al pueblo de Chile. La reforma previsional que tiene un costo cercano a US$3.500 millones, está debidamente financiada, como lo hemos demostrado".
Valora respaldo de Engel y Valdés
El mandatario también se refirió a la reforma laboral al indicar que "lo que busca no es precarizar los derechos de los trabajadores, busca crear más trabajo y compatibilizar mejor la familia y el trabajo".
Asimismo indicó que "aprecio la clara posición de cuatro economistas como Valdés, De Gregorio, Repetto y Engel; que dieron claro y categórico apoyo a esta modernización laboral, que es necesaria. No hay mejor política laboral que el pleno empleo, por tanto, los que más dicen que defienden a los trabajadores los resultados muestran que son los que menos trabajo crean, y eso es una contradicción evidente".
Enfatizó que "esta reforma no está pensada en fortalecer o favorecer solo a las cúpulas sindicales, sino que los 9 millones de trabajadores chilenos". Y repasó la agenda laboral del Ejecutivo "ya está presentado el de perfeccionamiento del Sence y el proyecto de flexibilidad laboral que entrega más libertades resguardando los derechos de los trabajadores; y va a venir el proyecto de modernizar la Dirección del Trabajo y un cuarto proyecto que va a buscar perfeccionar los mecanismos de negociación colectiva, esa es nuestra agenda laboral", concluyó.