Radiografía al financiamiento universitario: aumentan deudores y montos de los créditos

D. Morchio / F. Navarro



Un incremento de 15,5% registró el número total de deudores asociados a créditos universitarios a diciembre de 2010. Según cifras de la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras, a esa fecha los jóvenes que adquirieron este compromiso aumentaron a 365.016. 
Como contraparte, los montos asociados a este tipo de préstamos se empinaron a US$ 2.280 millones, lo que representa un 18,5% más de los recursos repartidos en el periodo anterior.

Destaca en este contexto, el crecimiento del crédito para estudios superiores de la Ley N° 20.027, correspondiente al con garantía estatal. 
A diciembre de 2009, los deudores alcanzaban 155.257, mientras que a igual fecha del año pasado llegaron a unos 207.000. Los recursos entregados para estos préstamos totalizaron US$ 1.075 millones. 
De acuerdo a la directora ejecutiva de Comisión Ingresa, Alejandra Contreras, las razones detrás de este aumento están asociadas a que ya “el 2009 y 2010, los recursos permitieron cubrir a la totalidad de postulantes del cuarto quintil de ingresos, vinculados a la clase media”. 
A diferencia de los otros préstamos del sistema, éste no exige capacidad de endeudamiento y, con ello, no es requisito garantía ni aval familiar. 
Además, al igual que el crédito Corfo está adecuado para todo tipo de instituciones, a diferencia de los otros beneficios estatales -Crédito Solidario, becas Mineduc- que sólo están orientados a cubrir el financiamiento de instituciones pertenecientes al Colegio de Rectores. 
Contreras espera que en 2011 se comience a avanzar “hacia los primeros tramos del quinto quintil”. Así, el monto estimado en colocaciones para los créditos con aval del Estado es de 
US$ 849,52 millones, con más de 100 mil nuevos beneficiarios.




Dura competencia


Las bajas tasas cobradas y el que se otorgue para toda la duración de la carrera, convierte a este tipo de créditos en una dura compentencia para los bancos. Según el analista de Humphreys, Gonzalo Neculmán, en la medida en que se incrementen los beneficios otorgados por los créditos del Estado, las colocaciones de los bancos en esta materia deberían comenzar a bajar. A ello, se suma que los créditos otorgados por las entidades bancarias “tienen riesgos asociados que manejan a través de mayores tasas”. 
Sobre la posibilidad de que en esta compentencia las entidades financieras disminuyan sus intereses, Neculmán afirma que dependerá de “costos de fondeo más baratos”. Sin embargo, asegura que tasas que logren competir con las del Estado podrían hacer que el negocio no fuera rentable.