Nasdaq cierra con un alza de 2,6% y levanta a Wall Street con miras a salvar la última semana de 2022
La incertidumbre en torno a la política de los bancos centrales y un eventual resurgimiento del Covid-19 se posicionan como los principales riesgos que dominarán el inicio del nuevo año.
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Wall Street se lanzó en una misión para salvar la semana en la penúltima jornada operativa de 2022, luego de caer por dos días seguidos en medio de las preocupaciones ante un eventual resurgimiento de la pandemia de Covid-19 y el fantasma de la recesión en Estados Unidos.
Al cierre de la Bolsa de Nueva York, el tecnológico Nasdaq Composite se expandió 2,59%, el S&P 500 avanzó 1,75% y el Dow Jones creció 1,05%.
La bolsa estadounidense cayó por segunda vez consecutiva este miércoles y acumula un alza semanal de 0,12% gracias al actual repunte. Se trata de una semana corta, a causa del receso navideño del lunes.
En suma, predominó el "vaso medio lleno" del actual panorama económico: una apertura de China capaz de reforzar sus expectativas de crecimiento a futuro y un conjunto de signos de desaceleración en EEUU que podrían facilitar el trabajo de la Reserva Federal.
A nivel local, el S&P IPSA cerró con un alza de 0,65% a 5.249 puntos. Este jueves en Chile se reportó una tasa de desempleo de 7,9% para el trimestre móvil terminado en noviembre, una décima menos que la estimación mediana de Bloomberg.
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Cruzando el Atlántico, el regional Stoxx 600 ganó 0,68%. Lideró el DAX de Frankfurt (1,05%), seguido por el CAC 40 de París (0,97%), el IBEX 35 de Madrid (0,72%) y el FTSE 100 de Londres (0,21%).
En Asia, el Nikkei 225 de Tokio cayó 0,94%, el Hang Seng de Hong Kong perdió 0,79% y el CSI 300 de China continental cedió 0,38%.
El índice MSCI de acciones globales acumula un desplome anual de 20,32%, con lo que 2022 camina a posicionarse como el peor año de la renta variable desde 2008.
Fin de 2022
La liquidez del mercado va drenándose a medida que se aproximan las festividades de fin de año, mientras el riesgo pandémico alimenta las incertidumbres de cara a 2023.
"La atención seguirá centrada en las tasas terminales de los bancos centrales y en la contundencia de sus políticas para vencer a la inflación", escribió en una nota el analista sénior de mercados de Oanda, Craig Erlam.
"Y luego está China y su giro de 180 grados en la prevención del Covid, que crea una enorme incertidumbre para el comienzo del año, mientras sube el número de contagios y se desborda el sistema de salud", agregó.
EEUU y varios otros países ya adoptaron medidas de control sanitario para los viajeros que hayan estado en China, donde la autoridad sanitaria estima que unas 37 millones de personas se habrían contagiado en un solo día la semana pasada.
Analistas han señalado que la reapertura de China además dificulta el trabajo de la Fed, ya que podría inyectar nuevas presiones inflacionarias mientras la entidad busca enfriar la economía estadounidense.
Las solicitudes de subsidios por desempleo confirmaron este jueves que el mercado laboral de EEUU se mantiene estrecho en términos históricos, lo que ya es un foco de presión en lo que concierne a la Fed.
Todo esto exacerba los riesgos de que el banco central cometa un error de política y desencadene una recesión en EEUU, mientras varios indicadores del sector inmobiliario han mostrado especial fragilidad en los últimos meses.
Este miércoles se reportó que las ventas de viviendas pendientes de noviembre registraron una sexta caída intermensual al hilo y alcanzaron su segundo menor nivel del registro histórico.
Previamente se informó que las ventas viviendas de segunda mano han bajado por 10 meses consecutivos, mientras que los permisos de construcción anotaron su mayor contracción intermensual desde abril de 2020.