Las reservas de petróleo en Estados
Unidos aumentaron la semana pasada en 200.000 barriles, mucho menos
de lo esperado, y se situaron en 325,8 millones de barriles, anunció
hoy el Departamento de Energía.
La mayoría de los analistas esperaba un incremento de dos
millones de barriles en las reservas de crudo, pese a lo cual el
precio del petróleo tipo Texas, de referencia en Estados Unidos, registraba
esta mañana un descenso de US$1,21, hasta los US$ 124,59.
Las cifras de los inventarios de gasolina excluyen la Reserva
Estratégica de Petróleo del Gobierno de Estados Unidos, que cuenta
con 702 millones de barriles, 70.000 barriles mas que en la semana
anterior.
Precisamente, la Reserva Estratégica de Petróleo está en medio de
un debate político en Estados Unidos debido al enfrentamiento entre el
Congreso y la Casa Blanca por la necesidad de destinar más crudo a
estas reservas.
Ayer mismo la Cámara de Representantes, como antes hizo el
Senado, rechazó por abrumadora mayoría el envío de crudo a la
reserva estratégica.
Pero la Casa Blanca ha dicho que Bush es partidario de continuar
alimentando la reserva estratégica de petróleo con 70.000 barriles
diarios y que se trata de una cantidad demasiado exigua que no
tendrá influencia alguna en los precios de la gasolina.
La atención de los mercados también estaba fijada hoy en las
existencias de gasolina, dado que en esta época primaveral es cuando
se inicia la temporada de mayores desplazamientos por carretera en
el país.
En este sentido, los inventarios de gasolina se redujeron en 1,7
millones de barriles, hasta los 210 millones de barriles, cuando los
analistas esperaban que cayeran en torno a un millón de barriles.
A esta hora los contratos de futuros de gasolina para entrega en
junio se negociaban a US$ 3,2046 por galón (3,78 litros), el
mismo precio que al cierre de ayer.
Al finalizar la semana pasada las existencias de crudo se
encontraban un 4,3% por debajo de hace un año, en tanto
que la gasolina se situaba un 5,9% por encima.
Las reservas de combustible para calefacción aumentaron en 1,4
millones de barriles y se ubicaron en 107,1 millones de barriles,
cifra que se encuentra un 12% por debajo de un año antes.
En la Bolsa Mercantil de Nueva York el precio del combustible
para calefacción bajaba dos centavos, hasta los US$ 3,6720 por
galón.