Pablo Granifo: “Es fundamental mejorar el nivel de la discusión económica y política en el país”
El presidente de Banco de Chile enfatizó que las discusiones sobre cambios al sistema económico, financiero e institucional “se sustenten en criterios técnicos de largo plazo”.
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El 28 de marzo se congregarán los accionistas de Banco de Chile para llevar a cabo una nueva junta anual. De cara a ello, este lunes por la tarde recibieron la carta del presidente de la compañía, Pablo Granifo. En la misiva -que es una de las que generan más expectativas en el mercado-, el ejecutivo analizó la situación del país y compartió algunos mensajes.
Granifo recordó que había anticipado que 2023 sería un año bastante copado en retos macroeconómicos dados los desequilibrios generados durante la pandemia. “El insostenible crecimiento del gasto y liquidez, que conllevó niveles de inflación, déficit de cuenta corriente y tasas de interés no observados en décadas previas, tendrían como consecuencia una reducción significativa en el crecimiento de Chile”, dijo.
Granifo recapituló que durante el año pasado el PIB experimentó tres trimestres consecutivos de caídas, generando con ello un crecimiento nulo en el año en su conjunto. “Este ajuste, que estuvo mucho más concentrado en consumo e inversión, fue determinante para que los volúmenes de colocaciones experimentaran una caída en términos reales, afectando el crecimiento del sistema”, sostuvo.
“La historia nos ha enseñado que cuando las políticas públicas se basan en meras motivaciones políticas y cortoplacistas, generan profundos costos al país”, dijo Granifo.
El ejecutivo del segundo banco más grande del país dijo que más allá de los ajustes que se concretaron “debemos prestar especial atención a la caída del crecimiento tendencial. Luego de décadas marcadas por significativos avances, el crecimiento ha promediado sólo un 2,4% desde 2014, ubicándose por debajo de la media global e incluso regional”, expuso.
Frente a las proyecciones que hay para el desempeño de la economía chilena , enfatizó que se mantendrá un bajo crecimiento de la actividad económica y que parte del deterioro se debe a la caída de la inversión, “variable que indudablemente ha sido afectada por factores como el deterioro en el ahorro local influido por los retiros parciales de recursos de fondos de pensiones y los altos niveles de incertidumbre político-institucional de los últimos años”.
Advirtió que una caída permanente en el crecimiento se traduce en “menores posibilidades de empleo, de disponibilidad de bienes e incluso de financiar de manera sostenible políticas que promuevan el bienestar de las personas, especialmente de aquellos sectores más vulnerables”.
Los llamados
Dado el contexto económico internacional y estimaciones locales, dijo que “resulta aún más urgente mejorar las bases que permitan un mayor crecimiento y, con ello, retomar la senda al desarrollo”.
Reforzó que “es fundamental que las discusiones sobre cambios al sistema económico, financiero e institucional que actualmente se están considerando, se sustenten en criterios técnicos de largo plazo”.
El timonel de Banco de Chile agregó que “la historia nos ha enseñado que cuando las políticas públicas se basan en meras motivaciones políticas y cortoplacistas, generan profundos costos al país y la sociedad en su conjunto”.
Insistió que “hoy, más que nunca, es fundamental mejorar el nivel de la discusión económica y política en el país, que vuelva a basarse en un sólido respaldo técnico, más allá de las legítimas diferencias y puntos de vista que puedan existir”.
Los retos en la banca
Además dedicó una parte importante de su carta a los desafíos que tiene la industria bancaria “que incrementará aún más la necesidad de mejoras continuas en sus modelos de negocios y niveles de eficiencia y productividad”.
También apuntó a que “el entorno de negocios estará marcado por menores niveles de inflación y tasas de interés, con regulaciones adicionales en materias como liquidez, capital y provisiones. Todo ello, sin duda, presionará los niveles de rentabilidad”.
El ejecutivo deslizó que “debemos estar conscientes de la existencia de potenciales discusiones y regulaciones en ámbitos no financieros, como aquellos relacionados con el cambio climático”.
Sobre este tema, exclamó que “sean abordados de forma eficiente y responsable, resguardando la existencia de condiciones para que, junto con contribuir al cuidado del medio ambiente, el sector siga siendo un pilar fundamental para el crecimiento y desarrollo del país”.
Salida de Andrónico Luksic del directorio: “Su profesionalismo, liderazgo y calidad humana serán una inspiración”
Pablo Granifo es uno de los colaboradores más estrechos de Andrónico Luksic. Inició su carrera en el negocio bancario junto al grupo empresarial en 1985, con sólo 27 años para formar el área de riesgo del Banco O’Higgins. Más tarde, la dupla convirtió a Banco de Chile en el segundo mayor banco en términos de participación de mercado en colocaciones y el primero en generación de utilidades. Sobre la salida de Luksic del directorio del banco, Granifo, quien lo reemplazó en la presidencia de Quiñenco, sostuvo: “Agradezco públicamente su profesionalismo, liderazgo y calidad humana, que estoy convencido serán una inspiración para quienes continuamos construyendo el presente y futuro de Banco de Chile. Su huella es imborrable y su legado marcará generaciones”.
“Su preocupación por lograr un trabajo de excelencia, su interés por el entorno social y el rol que le corresponde a la empresa privada en la construcción de un mejor país, su genuina dedicación por todos quienes trabajamos en Banco de Chile y su tenacidad para aceptar y afrontar grandes desafíos, son valores que han marcado la senda que ha recorrido el Banco en uno de los períodos más exitosos de su centenaria historia”, añadió.