Internacional
Moody’s amenaza rebajar nota de EEUU por crisis de deuda pública
El 2 de agosto expira plazo para elevar el tope legal de la deuda pública.
Por: | Publicado: Viernes 3 de junio de 2011 a las 05:00 hrs.
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La amenaza de una crisis fiscal está aumentando rápidamente en EEUU, a medida que se acaba el plazo para elevar el tope legal de la deuda pública y los legisladores no se ponen de acuerdo sobre un plan para recortar el déficit.
Y Moody’s le recordó ayer a las autoridades que el reloj está corriendo. La agencia advirtió que si no hay avances pronto pondrá en revisión su calificación AAA para una posible rebaja. Esta sería la primera vez que eso ocurriera, y no sólo daría una alarmante señal sobre el insostenible ritmo fiscal de la economía, sino que además elevaría los costos de financiamiento del gobierno, haciendo aún más difícil volver al equilibrio.
La calificación AAA es la más alta en la escala y es la máxima garantía de la solvencia de un emisor de deuda.
Si los legisladores no aprueban subir el límite legal de la deuda desde su nivel actual de 14,3 billones (millones de millones), el gasto llegará al tope el 2 de agosto y se suspenderán todos los desembolsos, lo que provocaría un impago técnico.
Para subir el techo de la deuda los Republicanos exigen que el gasto público se recorte en la misma proporción, facilitando un regreso al equilibrio fiscal, pero los Demócratas se oponen a un recorte muy severo que afecte la recuperación de la economía.
En abril, la agencia Standard & Poor’s ya había hecho una advertencia similar. En la última semana el riesgo de default en EEUU ha superado al de Corea del Sur, Rusia, Indonesia y Sudáfrica, medido según el costo de los CDS, que son seguros que contratan los inversionistas para cubrirse ante el impago de un bono.
Bancos en la mira
Pero Moody’s también está apuntando a los mayores bancos del país. La agencia puso en revisión para una posible rebaja las calificaciones de crédito de Citigroup, Bank of America y Wells Fargo.
La decisión se debe a que la reforma al sector financiero redujo el nivel de apoyo gubernamental para el sector en caso de nuevos problemas. Las entidades mantienen una elevada exposición a hipotecas residenciales y afrontan posibles costos legales relacionados con la última crisis financiera.
Los anuncios hicieron subir el rendimiento de los bonos y empujaron el dólar a la baja.
Y Moody’s le recordó ayer a las autoridades que el reloj está corriendo. La agencia advirtió que si no hay avances pronto pondrá en revisión su calificación AAA para una posible rebaja. Esta sería la primera vez que eso ocurriera, y no sólo daría una alarmante señal sobre el insostenible ritmo fiscal de la economía, sino que además elevaría los costos de financiamiento del gobierno, haciendo aún más difícil volver al equilibrio.
La calificación AAA es la más alta en la escala y es la máxima garantía de la solvencia de un emisor de deuda.
Si los legisladores no aprueban subir el límite legal de la deuda desde su nivel actual de 14,3 billones (millones de millones), el gasto llegará al tope el 2 de agosto y se suspenderán todos los desembolsos, lo que provocaría un impago técnico.
Para subir el techo de la deuda los Republicanos exigen que el gasto público se recorte en la misma proporción, facilitando un regreso al equilibrio fiscal, pero los Demócratas se oponen a un recorte muy severo que afecte la recuperación de la economía.
En abril, la agencia Standard & Poor’s ya había hecho una advertencia similar. En la última semana el riesgo de default en EEUU ha superado al de Corea del Sur, Rusia, Indonesia y Sudáfrica, medido según el costo de los CDS, que son seguros que contratan los inversionistas para cubrirse ante el impago de un bono.
Bancos en la mira
Pero Moody’s también está apuntando a los mayores bancos del país. La agencia puso en revisión para una posible rebaja las calificaciones de crédito de Citigroup, Bank of America y Wells Fargo.
La decisión se debe a que la reforma al sector financiero redujo el nivel de apoyo gubernamental para el sector en caso de nuevos problemas. Las entidades mantienen una elevada exposición a hipotecas residenciales y afrontan posibles costos legales relacionados con la última crisis financiera.
Los anuncios hicieron subir el rendimiento de los bonos y empujaron el dólar a la baja.