Banco de Inglaterra ordena revisión de vulnerabilidad
Las autoridades financieras revisarán a qué riesgo se exponen las instituciones.
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El Banco de Inglaterra (BoE) lanzó ayer una investigación para evaluar la amenaza que representa la brusca alza de las tasas de interés de largo plazo, en medio de las preocupaciones de que los aumentos en los rendimientos de los bonos del Tesoro de Estados Unidos desestabilicen al sistema financiero británico.
El banco central dijo ayer en el lanzamiento de su más reciente Informe de Estabilidad Financiera que los dos reguladores financieros, la Autoridad de Conducta Financiera y la Autoridad de Regulación Prudencial, realizarán una evaluación sobre “la vulnerabilidad de los endeudados y las instituciones financieras a los bruscos movimientos al alza de las tasas de interés de largo plazo”. El informe será entregado en septiembre.
El presidente de la Reserva Federal de EEUU, Ben Bernanke, anunció en mayo que comenzará a reducir el estímulo a fines de este año, lo que ha generado caídas en las bolsas globales y un alza en los rendimientos de los Treasuries, que llegaron a su mayor nivel en dos años.
“La violencia del ajuste en las últimas dos semanas subraya el alcance de la búsqueda por rendimiento y la necesidad de las autoridades de identificar si hay vínculos vulnerables o no”, dijo el vicegobernador de estabilidad financiera del BoE, Paul Tucker. Esto refleja la fragilidad de los mercados a cambios “relativamente menores” en las expectativas.
Alta vulnerabilidad
El BoE advirtió que los mercados y consumidores son “vulnerables” a un brusco ascenso de los costos de los préstamos, y afirmó que un número significativo de quienes poseen préstamos podrían experimentar problemas si las tasas suben antes de que mejoren las condiciones económicas. Un alza de 2% en las tasas podría afectar a hogares que representan un 20% de toda la deuda hipotecaria.
En sus recomendaciones publicadas ayer, el comité de política financiera del BoE aseguró que los colchones de activos líquidos que mantienen los prestamistas británicos para protegerse en contra de un colapso del crédito están por encima de los requerimientos mínimos y que tienen espacio para reducir sus tenencias en 70 mil millones de libras (US$ 107 mil millones).