Un ambiente completamente opuesto al de la noche del plebiscito del 4 de septiembre se vivía ayer durante el conteo de votos en el Hotel Marina Las Condes, lugar que albergó el punto de encuentro de los partidos de Chile Seguro (UDI, RN y Evópoli). Mientras la tónica hace ocho meses era de celebración y abrazos, el de anoche era un escenario de preocupación y derrota. Esto, luego del triunfo que logró la lista C que agrupaba a los candidatos del Partido Republicano.

A excepción de Gloria Hutt, el resto de los candidatos del pacto de centro derecha no llegó hasta el hotel, situación contraria al domingo 4 de septiembre donde el escenario de la puesta en escena estaba repleto entre directivas de los tres partidos, parlamentarios, ex convencionales e incluso alcaldes, en esta oportunidad solo se pudieron ver pocas autoridades.

Entre los tres partidos lograron alcanzar 11 consejeros (6 la UDI, 4 RN y 1 Evópoli), en contraste con los 22 obtenidos por el Partido Republicano. Con ello, las recriminaciones no tardaron en llegar a los partidos tradicionales de la derecha. Por ejemplo, durante el conteo de votos en el frontis de la sede de Renovación Nacional apareció un cartel en que se pedía la renuncia de la directiva de Renovación Nacional. Según fuentes al interior del partido, sería justamente un sector de la tienda el que estaría pasándole la cuenta a la mesa por la performance de la elección de consejeros constitucionales, esto en un contexto en que la disidencia espera poder ganar las próximas elecciones internas.

Si bien algunos personeros del pacto Chile Seguro reconocían la derrota de sus filas y que el Partido Republicano haya ganado terreno en esta elección, el consenso al interior de esa coalición estaba en que ganaron las ideas de la derecha, dejando atrás un “proyecto refundacional” que había propuesto la izquierda en elecciones anteriores.

El presidente de la UDI, Javier Macaya, felicitó al partido Republicano por sus resultados y aseguró que “es evidente que no obtuvimos los resultados que hubiésemos esperado y nosotros estábamos dispuestos a pagar un costo en el corto plazo y quizás es el costo político para los partidos que integramos Chile Vamos, (…) pero esperamos que el tiempo nos dé la razón y que el 17 de diciembre las personas que se integran de buena fe a este consejo constituyente trabajen para tener una nueva y buena Constitución”.

En esa misma línea y haciendo referencia al acuerdo que lograron las fuerzas de centro derecha durante la campaña del plebiscito constitucional de septiembre -donde prometieron apoyar el rechazo con la finalidad de votar en contra del texto que proponía la Convención y abrir el espacio para una nueva oportunidad haciendo referencia a tener una “nueva pero buena Constitución”- el presidente de Renovación Nacional, Francisco Chahuán, afirmó: “No nos arrepentimos ni un minuto de haber avanzado en el cumplimiento de la palabra empeñada”.

Para el timonel de RN, “el gran derrotado de esta elección es el Gobierno”. En esa línea aseguró: “Nosotros creemos que hay que avanzar porque la política debe volver a servir a las personas y para eso es necesario hacer los ajustes que se requieren en el marco constitucional, pero además haciéndose cargo de las urgencias de los chilenos y en eso estamos trabajando”.

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Distintas miradas

En tanto, hay quienes piensan que el rol que podría tener la centro derecha puede ser de bisagra en el Consejo Constitucional. La recién y única electa consejera de Evópoli, Gloria Hutt, señaló que “en el caso particular de Evópoli nos importa mucho (jugar) un rol como un puente entre la derecha más radical y la izquierda más radical también que van a estar presentes. Nos importa mucho tener la posibilidad de facilitar acuerdos, de convocar a las partes, de hacer propuestas, de trabajar con mucho rigor, con mucha seriedad que es lo que nos va a permitir recuperar la confianza de las personas en la política”.

Otros, como el diputado Jorge Alessandri (UDI), revelan que ya han iniciado contactos con el Partido Republicano para “limar asperezas” y buscar los puntos en común entre “las fuerzas del Rechazo”.

“Nosotros debemos reunirnos rápidamente con las fuerzas que han ganado hoy en día, que son parecidas a las fuerzas del Rechazo, cercanas al 62%, que son las fuerzas que van a defender la libertad, la libertad económica, la libertad de elegir y este modelo que ha hecho tan grande a Chile en los últimos años y nosotros como centro derecha tenemos que ser capaces de tender puentes para asegurar que esta nueva Constitución sea aprobada por una gran mayoría de los chilenos en diciembre de este año”, dijo el parlamentario.

Macaya hizo hincapié en la búsqueda de acuerdos. “En la sintonía de los temas que hoy le importan a Chile (defensa de las ideas de la libertad, temas de orden y seguridad, que no se pretenda refundar nuevamente el país) nosotros vamos a estar disponibles a tranzar los consensos necesarios con todas las fuerzas políticas del país”, concluyó.

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