Trump ajusta su estrategia tras salida de sus rivales
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Tras su arrasador triunfo en Indiana el martes, el polémico pre candidato republicano, Donald Trump, quedó ayer como el casi seguro nominado del partido para competir por la presidencia de EEUU, luego de que sus últimos dos contendores se retiraran de la carrera.
Así, Trump pasó ahora a concentrar su atención en Hillary Clinton, que encabeza la competencia entre los demócratas y que probablemente será su oponente en las elecciones nacionales.
Los observadores esperan que el magnate de los bienes raíces endurezca aún más su ya agresivo estilo, redoblando sus ataques contra la ex secretaria de Estado, en lo que algunos anticipan será la disputa electoral más sucia de la historia moderna del país.
Junto con enfocarse en Clinton, Trump deberá tratar de reparar las fracturas dentro de los republicanos, que se han dividido en torno a su figura. Para ello, ya ha hecho algunos gestos, como elogiar a su ex rival, Ted Cruz. Sin embargo, de inmediato dio muestras de que hay un límite a lo lejos hasta donde está dispuesto a llegar. Aunque su carácter polémico es uno de sus principales atractivos para un sector, también es lo que le dificultará ganar las elecciones nacionales.
