La tensión política ligada a las elecciones legislativas en Venezuela, que se desarrollarán este domingo, ha venido escalando desde hace meses, con múltiples denuncias respecto a ataques contra actividades de los candidatos opositores al gobierno.
Pero sin duda el momento más grave se produjo la semana pasada con el asesinato del líder opositor Luis Manuel Díaz, durante un acto de campaña.
La violencia y las declaraciones subidas de tono de parte del presidente venezolano, Nicolás Maduro, se dan en un contexto en el que las encuestas dan como favorita a la oposición para obtener la mayoría de los escaños en el Legislativo. Mientras, el gobierno está en un momento muy complicado debido, entre otros factores, a la deteriorada economía, la inflación más alta del mundo, escasez de productos básicos y corrupción.
A 48 horas de los comicios aún hay dudas que el gobierno reconozca una eventual derrota, especialmente tras las últimas declaraciones del propio Maduro, el que ha insinuado incluso que las fuerzas armadas están de su parte ante un escenario adverso.
Se espera que los países de la región observen con atención lo que suceda tras el domingo.