Mayor apertura en la discusión tributaria
Se está produciendo un clima más favorable en el gobierno...
Se está produciendo un clima más favorable en el gobierno respecto de la posibilidad de introducir modificaciones a la reforma tributaria, lo que evidentemente es positivo, ya que una reforma más consensuada es también más sustentable en el tiempo. Se ha generado un consenso creciente entre economistas sobre el menoscabo que tendría esta reforma en el ahorro y la inversión y, por ende, en el crecimiento potencial de la economía.
Chile no es superavitario en ahorro; por el contrario, ahora que es evidente el fin del ciclo expansivo de la minería, el desafío de aumentar el ahorro y la inversión cobra gran importancia.
Producto de lo anterior es que sería clave que esta mayor apertura en la discusión abarcara también una flexibilización del monto a recaudar con la reforma. Esto, porque si de los tres puntos del PIB que aportan los mayores impuestos a las arcas fiscales, dos tercios provienen de menor ahorro privado, atenuar este impacto y sustituirlo por menor gasto en consumo privado, tiende a generar un fuerte rechazo de los grupos afectados. En términos concretos, buscar mecanismos que atenúen el impacto en ahorro e inversión necesariamente reducirá la recaudación en el corto plazo.
Una potencial compensación podría venir, por ejemplo, de un aumento del impuesto al diesel, en la línea correcta de impuestos a los males, pero con un costo político elevado. Por ende, y dada la reducida disposición a pagar costos políticos en materia de impuestos, es que revisar el objetivo a recaudar es clave para atenuar los daños que esta reforma genera en el crecimiento de la economía.