Junto con los legítimos triunfos obtenidos el domingo por la ex presidenta Michelle Bachelet y el ex ministro y ex senador Pablo Longueira como representantes del pacto opositor Nueva Mayoría y de la oficialista Alianza, respectivamente, a las elecciones presidenciales de noviembre, ha destacado la amplia participación de la ciudadanía en estas inéditas elecciones primarias.
Más de tres millones de personas concurrieron a votar por su candidato, es decir cerca de 22% del padrón electoral, una cifra que estuvo muy por encima de los cálculos más optimistas sobre la asistencia al debut de este mecanismo previo a una elección presidencial -que obligó a la autoridad a ordenar el desalojo en la madrugada del jueves de las escuelas que estaban tomadas por estudiantes para permitir el sufragio-, y que incluso desafió el intenso frío que se sintió en una extensión considerable del territorio nacional.
El presidente Sebastián Piñera ha calificado las elecciones primarias como “un verdadero éxito, un verdadero triunfo de la democracia”, y ha pedido a los candidatos a las presidenciales “una campaña limpia, constructiva en que contribuyamos a engrandecer y no a achicar a nuestro país”. Dirigentes de buena parte del espectro político también han coincidido en aplaudir la contundente participación ciudadana en las primarias.
Decantados los nombres de los candidatos de las principales coaliciones políticas del país que competirán en noviembre, junto aquellos que no se midieron en primarias, todas las cartas ya están sobre la mesa en la carrera para suceder al actual gobierno y, en particular, la atención estará puesta en conocer más a fondo las propuestas que plantean.