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Alto contrasteEn la posición 48, dentro de un total de 186 economías, se ubicó Chile en la última versión del ranking Doing Business o facilidad para hacer negocios que elabora el Banco Mundial, ubicación en donde nuestro país sólo es superado por México, cuando se le contextualiza dentro de la región latinoamericana.
En una perspectiva histórica, dicho lugar supone una mantención en relación al año previo, ya que en la anterior medición se verificó un cambio metodológico que hizo que Chile pasara con los datos de ese año desde el puesto 41 al 48. Con todo, y en una dimensión más amplia, la performance del país acusa un retroceso, por ejemplo si se la compara con 2014 (lugar 34).
Desmenuzando el informe en una dimensión cualitativa hay varios elementos que llaman la atención, como lo es el que Chile pierde posiciones en la mayoría de los subíndices que componen el ranking, tales como acceso al crédito y pago de impuestos, donde fue evidente el efecto de la última reforma tributaria.
Por el contrario, la reforma al marco legal que regula los procesos de quiebra e insolvencia y la negociación de permisos de construcción, fueron las únicas dos dimensiones en que hubo avances, teniendo el primer ámbito un impacto sustantivo en que Chile lograra mantenerse en el ranking 2016, gracias a un avance de 14 casilleros en ese plano.
De esta forma, y si bien el ranking no es portador de malas noticias, sí enciende luces de alerta, ya que el país no ha sabido abordar (como lo hizo con la quiebras) las oportunidades y espacios de mejoras que faciliten el hacer negocios y, por el contrario, ha afectado ámbitos críticos, como ocurrió a la luz del ranking en el plano tributario.
