El Comité de Buenas Prácticas de la Bolsa de Comercio se encuentra avanzando un conjunto de definiciones que busca fijar pautas para una mejor resolución de los conflictos de interés y un mejor gobierno corporativo en la operación de este centro de negocios. La idea de esta instancia es aprobar en el curso del próximo mes un documento que sintetice las propuestas, las que luego serán sometidas al comentario de los agentes y corredores de bolsa, lo cual terminará dando forma a un ordenamiento único y obligatorio de recomendaciones.
El presidente del citado comité ha dicho que el esfuerzo realizado ha sido arduo y que no dudará en establecer criterios que duelan a quienes actúan en el mercado bursátil, ya sean intermediarios, gestores de fondos de terceros o generadores de negocios financieros. Lo anterior, añadió, incluirá por cierto dar cuenta de las situaciones de conflicto de interés relacionados con las operaciones de cartera propia, tema que se presume sensible para el mercado.
Las definiciones esbozadas van en la dirección correcta, tanto porque ha habido en el pasado reciente episodios que han sembrado dudas, como porque por definición uno de los activos clave del mercado de capitales es la confianza y todo lo que se haga por resguardarla es bienvenido.
Cualquier avance y mejora que selle espacios de sospecha irá a la larga en beneficio del propio mercado de valores. En esto los actores de este sector no debieran perder de vista que las exigencias han ido en aumento con el correr de los años y que lo que en el pasado se creía inocuo y hasta correcto en la actualidad puede no serlo, o incluso ser perjudicial e incorrecto.