Cartas al Director

Señor Director:


Bastante vergüenza, rabia e impotencia hay en el ambiente por el tema La Polar, como para que ahora aparezca el señor Saieh comprando un elevado porcentaje de la empresa. El problema es que él representa a Corpbanca, que tiene un 7% de la deuda, es decir ahora el mencionado señor está jugando en ambas bandas. No me parece prudente.

Rodrigo Zañartu



Señor Director:


A las numerosas observaciones financieras y legales que ha suscitado al fraude de La Polar, se han ido sumando algunas críticas al ‘modelo’ económico, y que en el fondo se trata de un reproche ético.
La acusación, en mi parecer, no debiese estar dirigida al sistema de libre mercado, pues los problemas emergen desde las personas involucradas, en particular desde sus deseos y aspiraciones desviados. En la práctica, sería iluso pensar que los valores éticos apuntados siempre se materializarán con plena fuerza y firmeza, pues como los matices morales que generan la confianza y la cooperación no son del todo impermeables, aquellos a veces se ven sobrepasados sin pudor, por sus contrarios, los que irrumpen estimulando un desenfrenado desorden moral. En el caso de La Polar parece ser que la codicia fue la que dominó las inclinaciones de algunos ejecutivos, conduciéndolos por el túnel que los ha llevado hasta el borde en que hoy se encuentran. 
En mi opinión, para que una sociedad libre cuente con un sistema económico que contribuya genuinamente al bien común, es necesario que las corporaciones adopten acciones y procedimientos favorables a un clima organizacional que estimule en sus gerentes el apego a principios éticos como los señalados, pues las inclinaciones, deseos y ambiciones humanas tienen límite.

Germán Gómez Veas



Señor Director:


Me resulta particularmente injusto, porque trabajé con Andrés Couve Rioseco en la formulación de la actual Ley General de Pesca, leer artículos de prensa en que se le atribuye una postura radical en contra del sistema de licitaciones de cuotas de pesca extractiva industrial y quiero creer que deben haber sido sacados de contexto o malentendidos sus dichos al respecto.
Couve es un hombre de honor y como tal y sobre la base del compromiso ético suyo y de los partidos políticos, logró consensuar el Título III de la ley relativo al acceso a la pesca extractiva industrial en un acuerdo político el 16 de enero de 1991, suscrito ante mis ojos y los suyos, por representantes de todos los partidos políticos, entre los cuales firmó don Sebastián Piñera.
Juntos perdimos la batalla que dimos por licitar el 100% de todas las pesquerías, incluso las que estaban en plena explotación, convencidos de la inconstitucionalidad de otorgar privilegios gratuitos incausados, tanto en sede legislativa como contralora. 
Es injusto se le atribuya la defensa de la perpetuación de las asignaciones gratuitas a Andrés Couve y que no debiera permitir que se le denueste públicamente atribuyéndole roles ambiguos, ilegales e inmorales.

María Cecilia Villablanca Silva

Ex jefe División Jurídica Subpesca 1990-1994



Señor Director:


Según los sesudos analistas políticos el descontento social se explicaría porque el país está sufriendo el “síndrome de los US$ 15 mil per cápita”. Sugiero se le informe a la furiosa ciudadanía que se trata sólo de una estadística porque cuando lleguemos a los 25 mil tampoco habrá repartija….

Gabriel Guiloff



Señor Director:


¡No a las represas en Aysén! ¡No a las contaminantes termoeléctricas! ¡No a los bosques aeróbicos asesinos de aves! ¡No a la energía fotovoltaica que ocupa mucho espacio y produce poco!
¡Sí a los fabricantes de vela!¡ Sí a las lámparas a carburo! ¡Sí a las lámparas a parafina!


F. Jorge David. L