La polémica sobre “Chilezuela” analizada desde la perspectiva internacional de Bloomberg
La agencia destacó que la crisis en el país sudamericano ha sido utilizada en los últimos años en muchos países de la región, aunque subrayó que la estrategia puede tener resultados contraproducentes.
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Las advertencias de que un triunfo del candidato de la Nueva Mayoría, Alejandro Guillier, en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de este domingo podría llevar al país a una situación de crisis similar a la que vive actualmente Venezuela han levantado una intensa polémica a nivel local.
Pero más allá de las denuncias sobre una campaña del terror y las réplicas sobre la radicalización de la izquierda a nivel local, el tema no ha dejado indiferente a los medios internacionales como Bloomberg, que dedicó un extenso artículo a analizar el asunto.
La agencia destacó que la crisis en el país sudamericano ha sido utilizada en los últimos años en muchos países de la región, aunque subrayó que la estrategia puede tener resultados contraproducentes. La incertidumbre, que ha golpeado a los mercados, no sería compartida por los votantes, con la confianza de los consumidores todavía sólida.
A continuación reproducimos el artículo completo de la agencia de noticias:
"Candidato multimillonario pasa al ataque en apretada elección en Chile"
Por Philip Sanders y Javiera Quiroga
En el período previo a la primera vuelta de los comicios presidenciales en Chile el mes pasado, la elección del multimillonario Sebastián Piñera y su agenda procrecimiento casi parecía un resultado obvio. Tan seguros estaban los inversionistas que apostaron vertiginosamente a las acciones chilenas haciéndolas subir a un máximo histórico.
Ahora, en vísperas de la decisiva segunda vuelta del 17 de diciembre, el resultado no es para nada seguro. La primera ronda resultó ser mucho más estrecha de lo que predijeron las encuestas y el equipo de Piñera pareció desconcertado.
Incluso han recurrido a una campaña probada que se ha utilizado mucho en América Latina en los últimos años: comparar al rival de Piñera -Alejandro Guillier, de la coalición gobernante de centroizquierda- con el líder socialista de la colapsada economía venezolana, Nicolás Maduro.
“Están pintando la escena como una emergencia política”, dijo Cristóbal Bellolio, profesor de la Escuela de Gobierno de la Universidad Adolfo Ibáñez. “Es un temor algo irracional, porque Guillier está lejos de ser Maduro, pero es una genuina” preocupación entre una parte de los votantes.
Fue ese temor el que provocó que el índice IPSA de la Bolsa de Santiago cayera un 5,9% el día después de la primera vuelta electoral el 19 de noviembre, cuando Piñera no logró convencer a mucho más de un tercio de los votantes de respaldarlo. También deprimió la confianza empresarial, que había alcanzado un máximo de tres años el mes anterior.
Los locales de votación abrirán a las 8 am del domingo y cerrarán a las 6 pm, y los primeros resultados se esperan para alrededor de una hora más tarde. Las encuestas de opinión muestran que no se puede predecir el resultado de la segunda vuelta.
Amenaza al modelo
Piñera, cuyo patrimonio se estima en US$ 2.700 millones según Forbes, se ha comprometido a duplicar con creces el crecimiento económico, crear 600.000 empleos y reducir el déficit presupuestario. Le gusta referirse a su trayectoria como presidente entre 2010 y 2014, cuando un auge del cobre ayudó a que el crecimiento promediara un 5,4% anual.
Por otro lado, según Piñera, Guillier representa una amenaza para el modelo económico que ha convertido a Chile en el país más rico de Sudamérica.
Guillier “se parece cada día más a Maduro", dijo Piñera después de la primera vuelta electoral. "Me pregunto, ¿a dónde nos llevará ese camino?".
Las advertencias son permanentes. Después de que Guillier dijo en un mitin que en su gobierno “meteremos la mano en los bolsillos” de los más ricos, el jefe de campaña de Piñera respondió que él actuaba bajo la influencia del Partido Comunista con un discurso de "violencia y agresión".
Asustar a los votantes
Esta exageración es lógica, dijo Kenneth Bunker, director del programa electoral de la Universidad Central. "Piñera necesita mantener su propio apoyo, mientras intenta alejar a los votantes de Guillier", dijo Bunker. "La idea del equipo de campaña de Piñera es permitirle ganar persuadiendo a los votantes rivales para que no vayan a votar".
El expresidente obtuvo el 36,6% de los votos en la primera vuelta contra el 22,7% de Guillier y el 20,3% de Beatriz Sánchez, líder de la recién creada alianza izquierdista Frente Amplio. Sánchez prometió apoyar a Guillier.
Riesgo de "Chilezuela"
Aun así, las advertencias de una catástrofe inminente pueden ser contraproducentes. Cuando un miembro del equipo de campaña de Piñera acusó a Guillier de intentar asustar a los votantes y luego agregó en el mismo tuit que no le gustaría vivir en un país como Venezuela, recibió amplias burlas. Chilezuela comenzó a ser tendencia en Twitter en Chile.
Igual de preocupante para Piñera es que mientras la confianza empresarial cayó después de las elecciones del 19 de noviembre, los chilenos comunes y corrientes no estaban preocupados y la confianza del consumidor alcanzó un máximo de dos años ese mes.
Los consumidores pueden tener razón. En Chile, el crecimiento puede depender mucho más del precio del cobre, la principal exportación del país, que de cualquier cosa que haga el presidente.
Tampoco las propuestas de Guillier son muy radicales. Su objetivo ha sido alentar a la industria a agregar más valor a las exportaciones de materias primas del país, una mayor autonomía regional y la inversión en infraestructura. Ha habido pocos detalles sobre la reforma de salud o planes de gastos precisos para el sistema educativo.
Además, la alianza de Guillier controla menos de un tercio de la Cámara de Diputados. Necesitará el apoyo de Frente Amplio y de los parlamentarios independientes, o de la coalición de Piñera si quiere lograr que algo se apruebe en el Congreso.
Sebastián Edwards, profesor de la Universidad de California en Los Angeles, estima que la victoria de Piñera agregaría un 0,6% al crecimiento económico, aunque solo sea por la recuperación posterior de la confianza empresarial. Dice que simplemente no cree en las tácticas de amedrentamiento respecto de Guillier.
"Guillier gobernando Chile todavía es mejor que todo lo demás en esta región", dijo Edwards.