La unidad que da voz (y voto) a BlackRock en las mayores compañías del mundo
A nivel latinoamericano, se concentran en promover mejores prácticas en directorios. En Chile, la participación en compañías es acotada, pero transversal.
- T+
- T-
El jugador dominante de la industria de ETF (fondos transados en bolsa, por su sigla en inglés) cada vez tiene una presencia más marcada en las decisiones que toman algunas de las mayores compañías del mundo. Y para usar ese poder, tiene una unidad especial.
Dada la fuerte atomización de inversionistas en los mercados desarrollados, la administradora de fondos más grande del mundo, BlackRock, ha logrado instalarse en los directorios de varias de las marcas más reconocibles a nivel mundial. Actualmente, está entre los mayores accionistas de McDonalds, Starbucks, The Coca-Cola Company, PepsiCo, Dell, Kraft Heinz, Microsoft, Amazon y Apple.
Esto se ha visto apoyado por el progresivo crecimiento de la industria de fondos indexados, donde BlackRock es rey, a través de su unidad iShares.
Para el manejo de los derechos políticos de sus participaciones, la firma fundada por Larry Fink tiene una rama independiente a la de las inversiones que se llama BlackRock Investment Stewardship, donde tienen una serie de directrices para votar en las juntas de las firmas y así promover mejores prácticas.
La unidad
Esta rama de BlackRock empezó en 2009 con sólo 16 empleados, expertos en gobiernos corporativos. Ahora tienen un equipo multidisciplinario de 45 profesionales distribuidos en siete oficinas regionales, votando en más de 16 mil juntas de accionistas al año.
Los mercados latinoamericanos están dentro de la oficina regional de Américas en Stewardship, encabezada desde julio de 2018 por Ray Cameron, quien trabajó antes en Morgan Stanley, Lehman Brothers y Barclays Capital.
Los ejes de la estrategia de votación de BlackRock se basan en cinco pilares: calidad del directorio (incluyendo composición y efectividad), medio ambiente, estrategia corporativa y alocación de capital, sueldos que incentiven que la gente se quede en las empresas y manejo de recursos humanos.
En América Latina, según informaron en su reporte anual de 2019, el foco está puesto en los gobiernos corporativos, ya que ven a la región en las “etapas tempranas” de la adopción de mejores prácticas en este ámbito.
“La mayoría de nuestras acciones en América Latina se enfocan en la calidad del directorio, y estamos viendo progreso en los reportes de las compañías y esfuerzos en avanzar con mejores prácticas”, describió el equipo en su informe.
En Chile
En el país, el espacio para los institucionales en la propiedad de las firmas es más limitado, pero eso no quiere decir que Stewardship se quede fuera.
A través de sus fondos de inversión, BlackRock maneja a nombre de sus clientes los derechos políticos de millones de acciones de empresas chilenas, lo que les da acceso a votos en las juntas de accionistas.
A través del vehículo indexado iShares MSCI Chile, la firma tiene participación en todas las acciones que componen el benchmark S&P IPSA, excepto Mall Plaza.
En todos estos casos, tienen participaciones menores a 1%, pero donde concentran mayor poder es en las firmas de menor tamaño. Ese es el caso de Forus, donde votan por un 0,88% de las acciones de la empresa, mientras que en Sonda tienen el 0,83% y en Parque Arauco el 0,81%.