Economía

Premier británica enfrenta a líderes de la UE bajo presión por iniciar el Brexit

Autoridades del bloque esperan que comiencen pronto las negociaciones, pero el Reino Unido dilata el proceso.

Por: Ignacio Gallegos F. | Publicado: Martes 19 de julio de 2016 a las 04:00 hrs.
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A una semana de asumir el poder político en el Reino Unido, la nueva primera ministra, Theresa May, comenzará mañana las reuniones con líderes de la Unión Europea, luego de que su país decidiera abandonar el bloque. La autoridad se encontrará con la canciller alemana, Angela Merkel, en Berlín mañana y para el jueves tiene programada una reunión con el presidente francés, Francois Hollande.

Según un comunicado de Downing Street, el viaje a la capital germana “será una oportunidad para discutir la relación bilateral, la cooperación ante una serie de desafíos globales y, por supuesto, cómo el Reino Unido y Alemania pueden trabajar juntos en momentos en que el país se prepara para salir de la UE”. En París, en tanto, “se cubrirán temas similares, además de los ataques del jueves pasado en Niza y la cooperación contra el terrorismo”.

El jefe de las negociaciones por el Brexit, David Davis, dijo a medios ingleses que tiene confianza en que el país podrá mantener su acceso al mercado único y aumentar las restricciones a la migración. Señaló que la UE “debe darse cuenta de que los británicos han dejado clara su opinión sobre retomar el control de nuestras fronteras (...) Al final del día, la ira será reemplazada por el interés común”.

Ayer, en su llegada a Bruselas para un encuentro de ministros del bloque, el canciller británico, Boris Johnson, dijo que “tenemos que poner en marcha la voluntad de la gente”, pero agregó que “nosotros no estamos saliendo de Europa. De ninguna manera abandonaremos nuestro rol de liderazgo en la cooperación europea y nuestra participación de todo tipo”.

Por su parte, May enfrentó por primera vez al Parlamento y luego viajó a Gales para reafirmar su compromiso de involucrar a todos los territorios del reino en las negociaciones, una promesa que ya había hecho en Escocia el viernes.

Amenaza de Bruselas

Los encuentros de May con sus contrapartes europeas ocurren cuando hay tensión en torno al momento en que se comenzará a concretar la salida del Reino Unido del bloque.

Sobre ello, hay señales mixtas. El secretario de Comercio, Liam Fox, trabaja con la tesis de que el Reino Unido invocará el artículo 2 del Tratado de Lisboa -iniciando dos años de negociaciones sobre el nuevo escenario- recién a fin de año, pero la propia May dijo el viernes que no lo hará hasta ganar el apoyo de Escocia, que se resiste a salir.

Todo ello genera preocupación y antipatía en Bruselas. Fuentes citadas por Bloomberg aseguran que estados miembros estudian la invocación del artículo 7 del Tratado de Lisboa, que contempla una serie de sanciones, argumentando que el Reino Unido no está cooperando de buena fe.

El ministro de Relaciones Exteriores francés, Jean-Marc Ayrault, dijo ayer que “mientras antes comiencen las negociaciones, mejor”.

 

confianza financiera

Una encuesta de la consultora Deloitte mostró que la confianza de los ejecutivos financieros de empresas británicas se desplomó entre el 28 de junio y el 11 de julio, días después del referendo sobre el Brexit. 73% de los 132 consultados se mostró "menos optimista" sobre las perspectivas financieras para su empresa, el nivel más alto desde que comenzó el estudio en 2007 y más del doble que en la medición anterior (32%). Asimismo, 82% de los CFO dijo que esperaban que sus compañías redujeran el gasto de capital durante el próximo año, mientras que 83% preveían una desaceleración en las contrataciones. En tanto, 68% cree que salir de la UE causaría un deterioro de largo plazo en el ambiente de negocios británico. "Ha habido un cambio hacia estrategias más proteccionistas tras el referendo: reducción de costos y cautela", dijo el economista jefe de Deloitte, Ian Stewart.

Banco central alemán propone reformar mecanismo de respuesta de Europa a las crisis

En su boletín mensual, el Bundesbank sugirió ayer que el Mecanismo de Estabilidad Europea (ESM, su sigla en inglés) sea la autoridad fiscal líder en la región y que absorba competencias que hoy tienen la Comisión Europea y el Banco Central Europeo. Esta, entre otras propuestas de la institución alemana, buscan mejorar la respuesta del continente ante las crisis financieras.


Las propuestas del banco central alemán apuntan a situaciones como la que vive Grecia, que aún depende de asistencia fiscal tras seis años desde que recibió su primer rescate y tras atravesar la reestructuración de deuda más grande de la hostoria en 2012.


El Bundesbank señaló que el marco económico de la región debe ser reforzado a partir de los tratados existentes. "Las reformas deberían apuntar a anclar la política fiscal orientada a la estabilidad en los estados miembro, limitando los efectos de contagio sistémico tanto como sea posible y fortaleciendo la estabilidad financiera en general".


Para el banco germano, el ESM podría tener un papel importante en la evaluación de perspectivas económicas, sostenibilidad de deuda y necesidades financieras de un país que solicita un rescate. También podría supervisar un programa de ayuda y negociar entre el gobierno y los acreedores si una reestructuración de deuda es inevitable.


El emisor manifestó que la propuesta "no presenta una solución simple o inmediata para los problemas relacionados con un endeudamiento soberano aún alto entre los miembros (...) los obstáculos sólo se reducirán poco a poco. Los gobiernos deben hacer a sus finanzas más resistentes".

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