INTERACTIVO: Ganancias de empresas de EEUU anotan su mayor avance desde el 2010

La temporada de entrega de resultados de las empresas que cotizan en el índice bursátil S&P 500 sumó un nuevo trimestre de cifras positivas, luego de que entre julio y septiembre se reportaran ganancias mejores a las esperadas consolidando el período como el de mejor crecimiento desde el tercer trimestre de 2010.

Hasta ayer, con 477 compañías publicando balances para los tres meses hasta septiembre –un 95,4% del total de firmas enlistadas en EEUU–, las utilidades subieron un 25,3%, según datos de Bloomberg, por encima de las estimaciones de un avance de 24,9%. Además, un 77,1% de las firmas que ha entregado sus balances ha superado las estimaciones de ganancias, ponderadas por acción, de los analistas.

El buen desempeño fue transversal, con los once sectores que componen el índice reportando números azules. El sector con mejor desempeño fue el de energía, que vio sus ganancias subir 112,5% en comparación con el segundo trimestre.

Le siguieron las firmas financieras con un 31,5%; y las de servicios de comunicaciones y de materiales, ambas con un 29,8%.

Sobre los tiempos por venir, analistas ven un alza de utilidades de dos dígitos para el cuarto trimestre, pero también ven una desaceleración de los beneficios a un dígito para la primera mitad de 2019.

Impacto de la guerra comercial

Durante la temporada de entrega de resultados no es inusual que las firmas expongan cuáles fueron los aspectos que impactaron sus ingresos y ganancias en un trimestre específico e, incluso, que pudieran afectar su desempeño a futuro.

En esta oportunidad, en medio de las tensiones por la guerra comercial entre EEUU y China, la mirada de los analistas estuvo puesta en lo que las compañías tenían que decir respecto de la aplicación de aranceles por parte de ambos gobiernos.

FactSet, la multinacional de datos financieros y software, evaluó a través las transcripciones de las conferencias telefónicas cuántas veces los directores ejecutivos hacían referencia al término “aranceles” y encontró que, frente al trimestre anterior, la preocupación parece haber empezado a menguar.

Hasta el 7 de noviembre, cuando 90% de las firmas había reportado resultados, un 33% (138 empresas) había citado a los “aranceles” como el factor de impacto en su desempeño. La cifra es menor a la de los tres meses anteriores: hasta el 7 de agosto, 417 compañías (o 38%) se habían referido a los gravámenes.

“La pequeña disminución (…) puede ser una señal de que existe una menor preocupación en las empresas estadounidenses sobre los impactos generalizados de los impuestos en toda la economía”, apunta FactSet.

Considerando cada sector, el industrial fue el más afectado por la disputa arancelaria. Le siguieron el de consumo discrecional, tecnología de la información y materiales. “En general, siete sectores vieron una disminución secuencial en el número de empresas que apuntan el impacto de los impuestos y sólo dos vieron un aumento”.

El factor consumo

Si bien los resultados de las compañías muestran que la economía de EEUU sigue sólida y que el consumo -que representa un 70% de la actividad- permanece fuerte, crece la preocupación hacia el desempeño del sector del retail, debido a los constantes cambios de preferencias de los ciudadanos que podrían desencadenar desafíos estructurales más profundos para la industria.

Ayer, en vísperas del Black Friday, un grupo de empresas -entre ellas Target y TJX-, revelaron en su entrega de resultados que el avance del comercio electrónico está impulsando los costos de logística y de envío, al tiempo que se hace vital la reducción de precios en tiendas físicas.

Target, por ejemplo, ha recortado precios y ha aumentado las inversiones en el delivery para competir mejor contra sus rivales Pantry de Amazon, y Jet.com de Walmart. En tanto, TJX citó factores como el alza de los costos de flete y los gastos de la cadena de suministro que impactaron sus resultados. Analistas advirtieron, además, que el aumento de los inventarios podría ser una señal de que las firmas tendrán que desocupar sus estantes en los próximos meses, presionando aún más los márgenes.