Mirai, la apuesta de hidrógeno verde de Toyota: “Queremos marcar pauta”
El CEO para América Latina y el Caribe, Masahiro Inoue, contó que en los próximos años abrirán la oferta a los clientes de manera masiva, pues ahora está bajo testeo.
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Masahiro Inoue llegó a Latinoamérica hace 17 años de la mano de Toyota, con la misión de hacer crecer la marca en la región. Sin embargo, conoce el continente desde hace 35 años, porque lo estudió en su natal Japón: “Se ha modernizado mucho, ahora hay mucho poder adquisitivo”, afirmó.
El ejecutivo japonés es el CEO de Toyota América Latina y el Caribe, y su misión es liderar localmente la transición energética desde la combustión interna al hidrógeno verde, la apuesta más ambiciosa que tiene actualmente el fabricante de autos.
Inoue explicó que las expectativas son altas porque en los últimos años el salto de Latinoamérica ha sido enorme.
La crisis del calentamiento global viene a desafiar a Toyota, uno de los principales vendedores de autos en el mundo con 10,4 millones de vehículos a 2022. Por lo mismo, los japoneses se están preparando y si bien continuarán con la distribución de unidades con combustión interna, el plan es lentamente reconvertir la compañía a fórmulas menos contaminantes y más sostenibles a largo plazo.
Hidrógeno verde: la tecnología de prueba
Según Inoue, la apuesta de Toyota por el hidrógeno verde partió desde hace tiempo y maduró en Chile luego de ver el desempeño de la marca: más de 30 mil unidades en venta al cierre de 2022. Esto determinó que había que preparar el mercado para el ingreso de un nuevo sistema de propulsión energético, para liderar el recambio futuro: “Queremos marcar pauta”, dijo el japonés.
El plan es comenzar paulatinamente con el testeo de tres unidades de Mirai, que en su idioma significa “futuro” y que pertenece a la unidad de negocios que marcan los recambios tecnológicos de Toyota: existe Mirai con energía eléctrica e híbridos y ahora con hidrógeno verde.
“Con la primera generación de Mirai (eléctrico) la venta fue a nivel global de 30 mil unidades los primeros seis años. Nuestra expectativa era mayor y las ventas fueron muy pocas, principalmente en Tokio, Francia y otros países. El precio era naturalmente más caro y la infraestructura no estaba disponible de manera fácil. Entonces, para el consumidor que sabe que esto es el futuro, no lo podían adquirir. Ahora, vamos a comenzar con otra estrategia, una comercialización de pocas unidades y a esperar que las condiciones estén preparadas para masificar un automóvil de estas características”, expresó.
Y aunque el desempeño de la primera generación de Mirai no fue lo que se esperó en un inicio, hoy representa el 20% de las ventas globales. En Latinoamérica, se espera que el hidrógeno verde tome fuerza a largo plazo, sobre todo, porque el recambio tecnológico parte en países como China o Estados Unidos. “La infraestructura en Sudamérica aún es muy cara, pero Chile al ser más organizado y con un mayor poder adquisitivo será el que correrá primero. Por eso lanzamos acá Mirai hidrógeno verde para que lo vean y se vuelva atractivo”, expresó.
Para poder impulsar que la infraestructura se desarrolle, Toyota construyó en sus oficinas en Santiago una planta de hidrógeno verde que tuvo un costo de US$ 700.000, que estará abierta para generar alianzas estratégicas con el mercado local. La idea es expandirse a futuro, de la mano de socios que estén interesados en implementar esta tecnología.
“Apostamos en Chile con Mirai porque queremos ser parte del desarrollo del hidrógeno verde. Este es el país con mayor potencial de producción de hidrógeno verde en el mundo, entonces, hay avances en la materia y particularmente en la movilidad hay tres puntos de desarrollo: primero en transporte pesado, luego en transporte público y finalmente de privados. Nuestra intención es acercar estos mundos y adelantar la fecha de la masificación, si es en 2040, queremos que sea antes. Por eso invertimos en la hidroestación”, expresó.
Respecto a la posibilidad de dejar de vender vehículos a combustión interna, Masahiro Inoue indicó que Toyota aún no tiene planeado abandonar esta tecnología. A su juicio, la producción sería negativa tanto para los trabajadores de la compañía como para mercados menos avanzados como India. “Cada años estamos experimentando en cómo mejorar la reducción del CO2, haciendo más eficiente nuestros vehículos”, señaló.
Así funciona Mirai en Chile
El Mirai de Toyota que está en exhibición en Chile es un automóvil que prácticamente no emite ruido, de hecho es tan silencioso que es difícil percibir cuándo esta encendido. Al igual que los autos a diésel y gasolina, el vehículo de hidrógeno verde tiene un tubo de escape pero, en vez de eliminar gases contaminantes, emite gotas de agua completamente inocuas para el medio ambiente, contó Inoue.
Pese a que el origen de la carga no proviene del sistema eléctrico, su propulsión es 100% a base de esta energía. Cuando el hidrógeno se mezcla con el oxígeno, se produce un choque entre ambos elementos que genera energía eléctrica que alimenta directamente al motor.