Macro

Santander ve estrecha situación fiscal: deuda pública alcanzará el 25% del PIB en 2018

En su informe trimestral, el economista jefe del banco, Felipe Bravo, anticipa un nuevo ajuste en la meta de balance estructural.

Por: Denisse Vásquez H. | Publicado: Viernes 2 de septiembre de 2016 a las 04:00 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

La economía chilena irá lentamente de menos a más en los próximos años y solo se acercará a su potencial hacia fines de la presente década. Así lo plantea Banco Santander Chile en su informe correspondiente al tercer trimestre, en el cual reafima su visión para el crecimiento del Producto en 1,6% este año y lo mejora a 2% para 2017 desde el 1,8% del reporte previo.

Y es que como explica el economista jefe del banco, Felipe Bravo, el ajuste a la baja que han experimentado variables como el consumo y la inversión en los últimos años pesará un tiempo más antes de que la actividad pueda acelerar el ritmo de crecimiento y acercarse a su potencial, que la entidad sitúa en 3,5%.

Para el próximo año, Bravo cree que el sector público continuará siendo una fuente importante de dinamismo, pese a la estrechez por la que atraviesa y que, según anticipa, debería continuar en los próximos años. “Nuestra expectativa es que el gasto público aumente en torno al 3% y, con un PIB creciendo al 2%, efectivamente apuntala el crecimiento”, afirma.

- Con los niveles que esperan para el gasto, ¿qué tan complicado ve el debate del Presupuesto 2017?

- Todos los ejercicios presupuestarios son difíciles y el que viene no será la excepción, probablemente este año va a ser tenso con una discusión agitada, porque más allá del ciclo político hay que comenzar a definir prioridades y a nadie le gusta perder. El crecimiento de 3% que esperamos para el gasto es una cifra muy austera, viable de alcanzar pero políticamente compleja. Y ahí la variable fundamental será la capacidad del gobierno de reasignar recursos.

- ¿El gasto tendrá que seguir moderado para poder alcanzar la meta de balance estructural?

- La meta al 2022 es cada vez más compleja de alcanzar y, de hecho, me atrevo a asegurar que el desafío seguirá incluso más allá. El gasto deberá crecer incluso menos en 2018, entre 2% y 3%

- ¿La regla estructural se deberá revisar nuevamente?

- Es algo que no podemos descartar, es perfectamente posible.

-¿Podría ser este año?

- Puede ser. Hay un tema de realismo pero también hay un tema de desafíos, y gastar más de forma permanente no es ser realista y eso es clave.

- ¿Qué podría revertir este panorama de un gasto fiscal más ajustado, además de un repunte del precio del cobre?

- Más que sentarnos a esperar que se recupere la minería, la reactivación es producción, es mayor recaudación vía impuestos, es mayor actividad económica. El mayor gasto permanente del gobierno tiene que venir de la mano de un aumento en la actividad económica. Si seguimos creciendo al ritmo que nosotros esperamos, claramente esas cifras que son austeras tienen que llevar a un gasto de gobierno que tenga un crecimiento austero también.

- ¿Qué efecto tendrá este escenario en el nivel de deuda pública? ¿Le preocupan los niveles actuales?

- Los niveles actuales no son preocupantes, pero sí lo es la velocidad de expansión. La deuda bruta del gobierno central al final del segundo trimestre del año fue de 20,2% del PIB frente a 3,6% en el 2008. Y al año 2018 será de 25%, pero en términos relativos y en comparación con otros países del mundo, ese nivel de endeudamiento sigue siendo bajo.

- El problema es que crece muy rápido

- El ritmo de deuda ha crecido más de cinco veces en 10 años y eso es algo que no se puede mantener, porque a este ritmo terminaríamos con una deuda similar a la Japón en 10 años más. Un 25% del PIB es una cifra importante pero tampoco nos quita el sueño, siempre que se pueda sostener en el tiempo. Es decir, si puedo o no asumir mi deuda y lo que miran las clasificadoras es cómo tu financias tus compromisos a largo plazo. Y aquí la clave es cómo gastos permanentes, compromisos permanentes que tengo con la ciudadanía, los financio también en forma permanente.

- Pronosticar los ingresos del gobierno no ha sido fácil en el último tiempo, con el menor crecimiento y precios del cobre más bajos

-No es sencillo, nadie nunca ha dicho que es fácil, y por eso es tan clave retomar un crecimiento más alto.

 

alerta por calidad del empleo

Más allá de la tasa de 7,1% para el trimestre mayo-julio que se conoció esta semana, el economista jefe del Banco Santander pone el foco en la calidad del empleo, que en su opinión se ha deteriorado en los últimos trimestres. "Llevamos ya dos meses en los cuales un dinamismo importante en la creación de empleo está vinculada al comercio, pero al comercio informal y eso es una señal de preocupación", afirma.


La inquietud, explica, radica en que ese tipo de trabajo tiene menores beneficios relacionados a seguridad social y previsión y, sin embargo, es lo que está dando recursos para vivir a la gente y al mismo tiempo está manteniendo el dinamismo en la creación de empleo.


"Tenemos que ver con especial atención las cifras agregadas del mercado laboral, porque la tasa de desempleo claramente se nos quedó corta", señala. Ante este escenario, cree que el mercado laboral otra vez será foco de análisis en el Informe de Política Monetaria (IPoM) del miércoles.

Lo más leído