Las claves que atentan contra un acuerdo en Multirut

Por Ángela Chávez M.




Los efectos en la empleabilidad femenina ante la voluntad de los empleadores de implementar salas cuna, fue una de las preocupaciones que manifestaron los integrantes de la Comisión de Trabajo del Senado la semana pasada. Ello en el marco de la discusión del Mutirut y tras conocer los alcances del acuerdo de “voluntades” que suscribieron los máximos dirigentes de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) y la Central Unitaria de Trabajadores (CUT).

Para avanzar en una solución, la senadora y presidenta de la instancia legislativa, Ximena Rincón (DC), se reunirá hoy a partir de las 9.00 horas con los titulares de ambas entidades, Arturo Martínez, por los trabajadores, y Lorenzo Constans, por los empresarios.

Es que en opinión de la parlamentaria, tras el acuerdo CPC-CUT, “se va a considerar para los efectos de los derechos laborales e individuales de los trabajadores, una sola empresa, aquella que a pesar de tener RUT distinto, tenga una dirección y objeto común, eso significa que van a tener derecho a sala cuna las mujeres cuando haya más de 20 y por lo tanto, no las van a contratar”.

De ahí que plantea legislar para que el tema de las salas cuna sea “un derecho de trabajadores y trabajadoras, independiente del número de operarios que exista en una empresa y que lo financie el Estado”.

Este es uno de los temas clave para buscar un acuerdo que permita destrabar la discusión del Multirut, postergada desde el año pasado y donde a la fecha, hay presentadas tres indicaciones: una del gobierno y dos del Partido Socialista (PS). La legisladora DC, también trabaja en su propia propuesta, por lo que la Concertación enfrentaría este debate con dos posiciones.




Las propuestas


En lo inmediato, en el caso de las dos indicaciones del PS, ambas son patrocinadas por el senador y miembro de la comisión, Pedro Muñoz. En una propone “eliminar el artículo 3° del Código del Trabajo”, que define el actual concepto de empresa y lo que abriría -para sus detractores- la puerta para que se abuse del Multirut.

En la segunda propuesta, plantea que constituye “un mismo empleador dos o más empresas relacionadas entre si por un vínculo de propiedad, cuando concurran las siguientes condiciones”, entre otras, que desarrollen las mismas o similares actividades, que el giro social sea de carácter complementario o accesorio, cuando los datos relativos a la gestión definan que forman parte de una misma organización o unidad económica o sujetas a una misma dirección laboral.

El gobierno por su parte, sugiere que serían un mismo empleador, dos o más empresas que desarrollen un mismo negocio o uno complementario, siendo este último aquel “administrado sin autonomía respecto de otro y que no puede subsistir por sí mismo”, que estén sujetas a una misma dirección y control laboral en una relación de dependencia y subordinación.

Para algunos expertos mientras la segunda indicación de Muñoz “es muy amplia y deja mucho espacio para la interpretación”, para otros, la propuesta del Ejecutivo “rigidizaría la actual situación”.

En ese cuadro, trascendió que el Ministerio del Trabajo valora el consenso en Multirut de la CPC y la CUT, aunque también advierten que carece de “fundamento técnico”.