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Alto contraste
eleccionesCon una serie de señales más bien de carácter positivo en el plano interno inició marzo, mes que tradicionalmente se asume como la partida de la agenda oficial del año, uno que estará marcado por el ambiente que rodeará una nueva disputa para el recambio en la presidencia de la República y en el Congreso.
Lo primero fue la expansión de 2,5% que registró el Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec) en enero frente a igual mes de 2024 informado por el Banco Central. Muy similar a lo se esperaba por los analistas, se trata de un resultado que curiosamente fue valorado tanto desde la perspectiva del Gobierno como del mismo mercado.
El alza de los turistas, que dio un buen empujón al comercio a lo largo del país, como un marcha favorable de la industria incluso neutralizó la preocupación que bien pudo haber provocado una leve caída de la minería.
Decidor, el Imacec no minero presentó un avance anual de 2,9%, mientras que en términos desestacionalizados fue de 1,4% respecto del mes precedente.
Lo segundo vino del ámbito fiscal. La ejecución presupuestaria correspondiente al primer mes de 2025 confirmó un hecho anticipado por el ministro de Hacienda, Mario Marcel, respecto al incremento de dos dígitos de los ingresos triburarios (16,4% anual), un tema de alta inquietud en lo más reciente. Y aunque el gasto público también mostró un salto de 12% en el período -un hecho que no conversa con la austeridad que sugieren estos tiempos-, al mismo tiempo la Dirección de Presupuestos (Dipres) publicó los decretos para activar los recortes de fondos comprometidos por la actual administración para el presente ejercicio por más de US$ 600 millones. Esto, con el fin de contener la situación de déficit fiscales y deuda más altos de los últimos años.
Tercero, la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) presentó un amplio grupo de trabajo para elaborar propuestas que puedan ser consideradas por los candidatos presidenciales que llegarán a la papeleta a fin de año bajo el nombre de “Motores para impulsar el crecimiento sostenible de Chile”.
Nombres de economistas y empresarios son parte de un listado de unas 60 personas que buscarán tener listo sus planteamientos de aquí a fines de junio, o sea luego de las primarias.
A todas luces, se convertirá en un insumo valioso, que bien merece ser acogido por los distintos sectores políticos. Antes de la partida oficial de la carrera presidencial es más que evidente que el crecimiento económico es un imperativo que va más allá de las tiendas que querrán llegar a La Moneda y que está en la base de un mayor bienestar de la población en los próximos años. No la única, pero sí central.
