A medida que se acerca la fecha fijada por el gobierno para el envío de su proyecto laboral, aumenta la expectación respecto de su contenido y surgen más voces que desde el mundo empresarial alertan sobre la falta de acercamientos en la discusión, que permitan consensuar una iniciativa que dé cuenta de los desafíos que los distintos sectores consideran importantes en este ámbito de la actividad económica.
El ex presidente de la CPC y actual titular de su comisión laboral, Rafael Guilisasti, ha señalado que ve difícil un acuerdo con la autoridad en esta materia, tanto porque el diálogo ha sido a su juicio insuficiente como porque en los contenidos que se conocen hasta ahora no han estado presentes asuntos que preocupan a los empresarios, como las huelgas o paros ilegales, por ejemplo.
El empresario Alfonso Swett también ha planteado en nuestro diario que sería positivo que la discusión en torno a esta reforma se ampliara a una agenda laboral integral, y no sólo a aquellos aspectos relacionados con el fortalecimiento sindical.
En una materia clave para la economía, como lo es su legislación laboral, es sustancial que el alcance de los cambios sea el adecuado y su contenido se acerque lo más posible al consenso.