Segundo round: modernización de la Dirección del Trabajo
Director, hermann consultores
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Jorge Hermann
Para aquellos que creen que terminó la incertidumbre laboral con el fallo del Tribunal Constitucional y con el próximo ingreso del veto presidencial al Congreso para ajustar la reforma laboral, la respuesta es no.
Lo que sucede es que aún falta el segundo round sobre la modernización y reforzamiento de la Dirección del Trabajo (DT), que fue comprometido por el gobierno durante el trámite legislativo de la reforma. Renovar la DT es necesario, porque la reforma le confiere un rol principal en la negociación colectiva, junto con que ésta deberá fortalecer los sindicatos, facilitar el diálogo entre las partes y potenciar la mediación laboral.
Al respecto, un grupo de funcionarios trabaja con sigilo en la elaboración del Proyecto de Ley con apoyo de la Organización Internacional del Trabajo. Los trascendidos del gobierno son que se reforzaría la “autonomía” de la DT con la elección de los cargos de primer y segundo nivel jerárquico por la Alta Dirección Pública, mayor tecnificación del servicio, la concursabilidad general, la constitución de la carrera funcionaria y mejores asignaciones de desempeño. El Proyecto de Ley ingresaría al Congreso en el segundo semestre del 2016.
Pero, dado que el diagnóstico y la elaboración de la reforma fueron erróneas, porque se basó en la existencia de una conflictividad laboral entre trabajadores y empresas, es necesario un cambio radical en la DT para que no dependa del gobierno de turno.
La nueva DT debería ser una corporación autónoma de derecho público con personalidad jurídica y patrimonio propio, compuesta por un consejo independiente de cinco miembros elegidos por el Presidente de la República y ratificados por el Senado. El consejo es responsable de la dirección técnica de la institución y un Director Ejecutivo estará a cargo de la administración y fiscalización.
Además, es necesario hacer más eficiente el proceso de resolución de disputas laborales previo a los tribunales. Por lo que, sería interesante avanzar en un modelo similar al “Advisory, Conciliation and Arbitration Service (ACAS)” del Reino Unido o el “Federal Mediation and Conciliation Service (FMCS)” de Estados Unidos, instituciones independientes y neutrales que ayudan en la resolución de conflictos con asistencia técnica (negociación colectiva, mediación y arbitraje) y capacitación. La efectividad en la resolución de las disputas en la ACAS y FMCS fue un 78% y 85% del total en 2015, respectivamente.
Por lo tanto, la incertidumbre laboral aún no ha terminado porque falta el segundo round sobre la modernización de la DT. Dado que, la reforma laboral aumentará la conflictividad entre empresas y trabajadores, su implementación requiere necesariamente de una institución autónoma y de un nuevo sistema de resolución de conflictos.
La renovación de la DT es igual de importante que la reforma, por lo que la elaboración del Proyecto de Ley requiere de cierto cuidado para que no zozobre en el trámite legislativo.