Invertir en transformación: el impacto de las megafuerzas en el futuro regional
AITOR JAUREGUI Director de BlackRock para América Latina
Desde 2020, en BlackRock hemos señalado que la economía global entró en un nuevo régimen, caracterizado por mayor volatilidad macroeconómica y de los mercados. Este cambio exige dejar atrás modelos tradicionales de ciclos económicos y adoptar estrategias más dinámicas. A su vez, presenciamos transformaciones profundas que reconfiguran industrias y sociedades.
Estos procesos los conocemos como “megafuerzas”, tendencias que hoy están redefiniendo la economía global y el panorama de inversión en el mundo y América Latina, incluyendo: divergencia demográfica, disrupción digital e inteligencia artificial (IA), fragmentación geopolítica, transición energética y evolución de la arquitectura financiera. En este contexto, los inversionistas pueden beneficiarse de los cambios estructurales, con un foco temático en las inversiones, priorizando estrategias que trasciendan las fluctuaciones de corto plazo.
“Chile entendió la importancia de estas tendencias y ha desarrollado estrategias para abordarlas, incluyendo el Plan Nacional de Infraestructura Pública 2025-2055 y la Política Nacional de IA”.
América Latina, con el 8% de la población mundial, es una región fundamental a nivel de inversión. La infraestructura es clave para su desarrollo y modernización, impulsada por la digitalización y la transición a una economía de bajas emisiones de carbono. Según el BID, se necesitan más de US$ 2,2 billones en inversión para 2030, área en que destaca el sector energético.
Otro factor clave es el auge de la IA generativa, que está transformando la demanda de infraestructura debido a la necesidad de data centers avanzados y sistemas energéticos eficientes. Se estima que para 2030 las grandes empresas tecnológicas de EEUU invertirán más de US$ 700 mil millones anuales en data centers, chips y energía. Aunque las empresas estadounidenses lideran esta revolución, la IA generativa también cambiará empleos e industrias en América Latina, aumentando la demanda por data centers y fortaleciendo la transformación digital y la nube en distintos sectores.
La evolución de la arquitectura financiera es otra de las megafuerzas que redefinen la inversión en la región. Los mercados privados desempeñan un rol creciente en financiar empresas emergentes vinculadas a infraestructura e IA, mientras que los prestamistas no bancarios están asumiendo funciones que antes eran de los bancos, apoyados por inversionistas institucionales locales.
Chile entendió la importancia de estas tendencias y ha desarrollado estrategias para abordarlas. El Plan Nacional de Infraestructura Pública 2025-2055 proyecta una gran inversión, con el fin de mejorar la conectividad y el desarrollo territorial. Y desde 2021, el país cuenta con una Política Nacional de IA, que lo ha posicionado como líder en el tema en la región, según CENIA y la CEPAL.
El mundo atraviesa profundas transformaciones impulsadas por fuerzas estructurales que redefinen la manera en que vivimos, trabajamos e invertimos. América Latina y Chile, no son la excepción. En este contexto, los inversionistas deben adoptar un enfoque activo, diversificado y orientado al largo plazo. Explorar oportunidades en mercados privados como infraestructura y crédito privado será clave para encontrar nuevas fuentes de retorno y diversificación en un panorama global en constante cambio.