Imágenes y realidad de la economía española
¿Qué hay de coyuntural en la difícil situación económica de España? ¿Es posible que la que fue octava economía del mundo se haya convertido en la referencia de todos los males económicos?
¿Qué hay de coyuntural en la difícil situación económica de España? ¿Es posible que la que fue octava economía del mundo se haya convertido en la referencia de todos los males económicos?
El presidente Rajoy ha introducido medidas, en el ámbito fiscal, administrativo, presupuestario, laboral, en sanidad, educación y en el sector financiero, y seguirá con otras reformas que prepararán a la economía española para su definitiva recuperación. En un momento se pensó que estas reformas serían suficientes para encauzar la confianza de los mercados. Sin embargo, los esfuerzos se han enfrentado con la dura reacción de los mercados, hasta que fue necesario poner en marcha, gracias a la solidaridad europea, el programa de apoyo a parte de la banca española.
No es España el origen último de la desconfianza reinante, sino la Unión Europea y el euro, convertidos en el objetivo de la saña de los mercados. Más allá de las reformas políticas que requiere la UE, no cabe perder de vista lo que constituye la realidad de la estructura económica española. Así lo ha hecho notar en mayo el Consejo Empresarial para la Competitividad que reúne a 17 de los mayores grupos económicos del país.
España tocará fondo en el cuarto trimestre de 2012, en el que se comprobará el dinamismo de nuestro sector exportador, con un crecimiento en torno al 3,4%. Nuestros Costos Laborales Unitarios han caído casi 6% desde el máximo alcanzado en 2009. Las exportaciones españolas (2009-2011) crecieron 36%, lo que supone una mejora equivalente al 5,1% del PIB. La inflación está por debajo de la media europea y a pesar de la caída del empleo total se percibe un crecimiento de la fuerza laboral en algunos sectores, y la inyección de fondos del Instituto de Crédito Oficial para pagar a proveedores facturas atrasadas de las administraciones públicas tendrá un impacto positivo en la PYME y en la creación de empleo. La flexibilidad interna debería impulsar la contratación a tiempo parcial y cabe albergar, esperanzas de que podamos ir absorbiendo a partir de 2013 la tasa de desempleo estructural del 16%.
El déficit por cuenta corriente ha alcanzado en 2011 el 3,5% del PIB, y es ampliamente financiable por los flujos de Inversión Extranjera Directa, que en los últimos dos años ha supuesto el 2,4% del PIB. Con la entrada de 30 mil millones de euros en 2010 y 19 mil millones en 2011 el stock total de IED se situaba en el 44 % del PIB. El turismo sigue afirmándonos como uno de los principales líderes mundiales, con 59 millones de visitantes en 2012 y más de 53 mil millones de euros de ingresos.
España tiene empresas muy competitivas y una de las mejores infraestructuras de nuestro entorno europeo. Las grandes empresas españolas y muchas de las medianas han llevado a cabo un exitoso proceso de internacionalización, potenciado en el desarrollo de la crisis. Los ingresos de nuestras empresas en el exterior ascendieron a cerca de 210.000 millones de euros en 2011. El sector franquiciado, cuenta con 242 firmas, en 112 países y 11.200 establecimientos. El sector bancario, ya ha realizado un esfuerzo notable en la asunción de los saneamientos requeridos. Desde 2007 se han realizado provisiones de 190.000 millones de euros y el FMI considera que sólo el 30% del sector bancario español quedaría sujeto a la aplicación del programa financiero de apoyo recientemente acordado. El ajuste del flujo de vivienda nueva está prácticamente concluido y el peso de la inversión residencial respecto del PIB se ha reducido a la mitad en los últimos cinco años. La demanda extranjera de vivienda en 2011 se ha elevado a 4.747 millones de euros de inversiones en unas 50.000 viviendas. En materia de control del gasto público las medidas anunciadas y los márgenes de acción hacen creíble el cumplimiento de los objetivos de déficit, si bien el Estado lo hará de forma holgada, y las Comunidades Autónomas deberán ser objeto de un seguimiento especial.
España está sobrepenalizada por los mercados de deuda pública. La actual prima de riesgo no se justificaría ni por tamaño, ni por composición de la deuda, ni por déficit, ni por crecimiento potencial. Si se compara la ratio entre prima de riesgo y deuda total, dicha prima estaría sobrepenalizando a España entre tres y cuatro veces más que a Francia y más de diez veces que al Reino Unido. Existe la percepción de un desacoplamiento entre las tendencias estructurales de nuestra economía y las orientaciones impuestas por los mercados a España, independientemente de nuestros factores endógenos. Hay que encontrar soluciones políticas para nuestro entorno europeo para acelerar nuestra recuperación. Necesitamos más Europa, pero conviene no olvidar las fortalezas y potencialidades de nuestra economía que con esfuerzo y eficacia hemos construido en los últimos años, que serán, a no mucho tardar, la garantía de una recuperación sólida y firme.