El Día de la Mujer Emprendedora
Gina Ocqueteau Directora Nacional de la Asociación de Emprendedores de Chile ASECH
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Gina Ocqueteau
Su idea pronto se transformó en una conmemoración a nivel mundial. Todo ocurrió en 2014, cuando la conductora de televisión y empresaria estadounidense Wendy Diamond puso el tema sobre el tapete. Había que reconocer al sinnúmero de mujeres que hoy en día crean empresas, empleos y nuevos negocios en todo el mundo.
Su llamado tuvo un rotundo éxito. El mensaje fue transversal y efervescente, incluso en la ONU, que declaró el 19 de noviembre como el Día Internacional de la Mujer Emprendedora. Wendy Diamond logró algo sin precedentes: poner al emprendimiento en la agenda de género mundial. Sin embargo, las brechas seguían y siguen ahí, como rocas inamovibles.
De acuerdo a cifras que manejamos desde ASECH, un 34,3% de la actividad emprendedora en Chile corresponde a mujeres. De esos negocios, un 70,2% corresponde a microempresas, es decir, con una facturación anual de máximo 2.400 UF, donde sus trabajadores casi siempre rondan entre una a cinco personas como máximo. Entre las encuestadas, un 43% admitió falta de alternativas de financiamiento, donde un 83% admitió que la principal fuente de recursos para su empresa son los propios, los de familiares o amigos.
Y es que la celebración del 19 de noviembre no sólo tiene que ver con el empuje y coraje que muchas desarrollamos con nuestros negocios. También se vincula con la necesaria sensibilización que requiere nuestra sociedad, ya que aún existen subestimaciones, prejuicios y dicho francamente, cierta discriminación a nuestras decisiones en ámbitos empresariales y financieros. ¿O existe una diferencia sustancial en el hecho de que sea hombre o mujer quien desea emprender?
Si bien primero hablé sobre Diamond y la realidad emprendedora de nuestro país, también busco agradecer con esta líneas a las que decidieron crear su propio negocio, haya sido por gusto o por necesidad, porque cada día somos más en este mismo tren. También mis felicitaciones a las que sortearon barreras de una sociedad machista y a las que cumplen un doble y hasta un triple rol, porque muchas además de empresarias somos madres, hijas, parejas, amigas, ciudadanas y otras facetas que requieren de toda nuestra atención.
Ya que comencé con una estadounidense, terminaré con otra. La primera vicepresidenta electa en la historia de Estados Unidos, Kamala Harris, quien en su discurso de victoria reconoció que sí, es cierto que es la primera mujer en ostentar el cargo, pero por ningún motivo será la última, pues de ahora en adelante cada niña que la vea sabrá que puede llegar a ser como ella. Un camino que sólo se logró “gracias a las mujeres que lucharon y sacrificaron muchísimo por la libertad y la igualdad”, como dijo para todo el mundo.
Algo así me gustaría fomentar en las emprendedoras del futuro. Un sentimiento de agradecimiento y de reflejo en sus antecesoras, verdaderas agentes de cambio que permitieron emparejar la cancha para sus negocios. Una buena manera de partir con esto es valorando el próximo 19 de noviembre. El Día Internacional de la Mujer Emprendedora.