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Columnistas

Cambios en el escenario macro, implicancias fiscales y de mercado

Por: Equipo DF

Publicado: Jueves 20 de marzo de 2014 a las 05:00 hrs.

No cabe duda que el escenario macroeconómico ha cambiado sustantivamente desde que se presentó la Ley de Presupuestos para este año, a inicios de octubre de 2013. Las proyecciones macroeconómicas que se incluyeron en dicha Ley, en ese momento eran razonables y estaban en línea con lo que anticipaba el mercado y el Banco Central, pero hoy son demasiado optimistas y, tanto en lo que se refiere a actividad, como en lo referido al precio del cobre, parecen simplemente inalcanzables.

Afortunadamente, nuestro país cuenta con una regla fiscal que en los últimos años se ha perfeccionado y consolidado y que tiene como uno de sus principales objetivos aislar el gasto público de las fluctuaciones del PIB y del precio del cobre. Así, pese al cambio en el escenario macro de los últimos meses, el nivel de gasto público aprobado en el Presupuesto para este año no está en riesgo, puesto que su definición se hizo en base a parámetros de largo plazo estimados por expertos independientes y no en base a los valores efectivos proyectados para este año.

Lo anteriormente expuesto no quiere decir que las finanzas públicas no se verán afectadas. El menor crecimiento del PIB y el menor precio del cobre que se proyecta para este año incidirán negativamente en los ingresos efectivos, así como también en el balance fiscal efectivo. En BBVA Research estimamos que en un escenario en que la economía crece 3,5%; el precio del cobre promedia US$ 3 la libra y el tipo de cambio promedia $ 570, el fisco tendría menores ingresos por cerca de US$ 1.200 millones. Tanto el menor crecimiento del PIB, como el menor precio del cobre reducen los ingresos efectivos, pero el mayor tipo de cambio contrarresta en parte esos efectos. A lo anterior se debe agregar un escenario que vemos muy probable -y deseable- y es que se opte por capitalizar Codelco por unos US$ 1.000 millones, en cuyo caso, los menores ingresos fiscales disponibles para este año rondarían los $ 2.200 millones. Sumando y restando, a última línea veremos un aumento del déficit fiscal desde 0,9% del PIB estimado en el Presupuesto a una cifra que fácilmente puede llegar a 1,7% del PIB.

A pesar de este escenario de menores ingresos, el Fisco no estará obligado a liquidar dólares este año, principalmente porque la Ley de Presupuestos lo autoriza a emitir deuda por hasta US$ 6.000 millones (2% del PIB), lo que bastaría para financiar un déficit efectivo de estas características. Lo anterior tiene al menos dos implicancias: (1) El tipo de cambio no tiene necesariamente contención Fiscal como fue el caso en años previos con liquidaciones de dólares bastante relevantes; (2) La emisión de deuda pública este año sería casi completa.

En suma, como consecuencia del cambio en el escenario de ingresos fiscales, tendremos más deuda emitida por la Tesorería y mayor necesidad de bajas en la TPM si el Banco Central desea estimular la parte media/larga de la curva. En BBVA Research estimamos que la tasa de instancia llegará a 3,25% a fin de año, escenario que contempla una breve pausa tras el recorte de la reunión de este mes.

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