Después de la pandemia, nuevas ciudades
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Señora Directora:
La crisis sanitaria nos deja lecciones respecto de cómo vivimos. Necesitamos nuevos estándares de higiene para espacios y transporte público, de distanciamiento social, de ventilación para interiores, entre otros, que nos protejan de contagios y temores que la pandemia dejará.
Hace tiempo se discute el desarrollo de proyectos residenciales hiperdensos, que aglomeran a habitantes en ascensores y áreas comunes; sin embargo, no debemos demonizar la densificación: necesitamos crecimiento equilibrado y armónico. El uso de suelo mixto también favorece la calidad de vida urbana y la salubridad. Combinar el uso residencial con el de servicios o comercio permite formar subcentros y barrios en donde vivienda, trabajo, educación y abastecimiento cohabitan.
Equidad territorial e integración social, temas conocidos por quienes planificamos ciudades, siempre han sido imperativos: el estallido social y esta pandemia lo denuncian con elocuencia.
Pasada la crisis, deberemos considerar esta arista en la conformación de nuestras ciudades y el modelo policéntrico e integrado es una respuesta. Zonas mixtas conectadas por robustos sistemas de transporte y redes de comunicación serán indispensables.
Ignacio Hernández
Presidente Asociación de Oficinas de Arquitectos (AOA)
